La policía desaloja por la fuerza a los trabajadores de Antena 3
Veinticuatro furgones policiales aguardaban la orden de la delegación del Gobierno desde las once de la mañana. El ultimátum llegó a las seis de la tarde: si los 400 trabajadores encerrados en el comedor de Antena 3 no desalojaban voluntariamente la empresa, la policía lo haría por la fuerza.
Y así fue. Entre abucheos, gritos y protestas de los más de 300 empleados que rodeaban el exterior de la cadena, la policía entró en el edificio de San Sebastián de los Reyes y obligó a los 400 trabajadores a salir a la calle.
'Es la primera vez en la historia de la democracia que la policía entra en un medio de comunicación', afirmó el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, presente en la puerta de Antena 3 en solidaridad con los trabajadores.
Los empleados habían permanecido encerrados durante toda la noche del martes en el comedor de la cadena, en protesta por la última oferta de la empresa en relación al expediente de regulación de empleo (45 días por año trabajado y 6.000 euros de indemnización).
Ayer, la dirección se había ofrecido a mantener otra reunión a las 4 de la tarde con los trabajadores para considerar la propuesta de los sindicatos. En vez de diálogo, sin embargo, recibieron una orden: desalojar el comedor.
El interior de la cadena, mientras tanto, presentaba un aspecto fantasmal. A lo largo de los pasillos sólo se veían guardias de seguridad que custodiaban los puntos neurálgicos de la cadena: la redacción de informativos y la unidad desde donde se emite la señal. A pesar de que dentro trabajaban empleados de los servicios mínimos, las puertas estaban cerradas con llave y con candados en las cerraduras.
La empresa quería evitar por todos los medios que volviera a suceder lo que el día anterior: unos 100 empleados entraron en la redacción y retrasaron cinco minutos los informativos de la tarde.
Tampoco se ahorraron esfuerzos en seguridad: los 24 guardias que están normalmente en la cadena se reforzaron con 120 más. Además, decenas de policías vigilaban amenazantes desde sus furgones aparcados en la salida 19 de la carretera de Burgos, hasta que la orden se cumplió. La dirección de la cadena enviará hoy el expediente al Ministerio de Trabajo para que sea éste quien lo tramite. Los trabajadores, mientras tanto, mantendrán la huelga hasta el domingo. Los servicios mínimos continuarán con toda 'normalidad', con los guardias de seguridad vigilando y candados en las puertas.