La Bolsa ha descontado la fortaleza de EE UU
La locomotora económica de EE UU está en marcha. Las incertidumbres comienzan a despejarse y alcanzar tasas de crecimiento del 6% es ahora una meta factibles. Merrill Lynch y Lehman Brothers elevaron la semana pasada sus perspectivas de expansión del PIB para el tercer trimestre hasta esa cifra mágica. Pero Wall Street permanece impávida. Los resultados por encima de lo esperado de 3M y Citigroup apenas repercutieron ayer en las Bolsas, y ésa promete ser la tónica en las próximas semanas.
'Todo el mercado ya tenía bastante claro que las subidas de los beneficios iban a estar en el orden del 20% en el tercer trimestre del año', explica Jaime Hoyos, director de inversiones de la gestora de Crédit Agricole, 'entonces el valor sólo será premiado si presenta un mensaje positivo para los siguientes trimestres', concluye. La gestora anticipa un enfriamiento del crecimiento estadounidense hasta ritmos del 2,5% para la segunda mitad de 2004.
'Hay muchas cuestiones pendientes. Por ejemplo, hasta qué punto la recepción de inversión es cíclica o qué pasará con el consumo cuando desaparezcan los incentivos fiscales en 2005', apunta José Luis Martínez, de Citigroup. 'Con las Bolsas caras en términos históricos, no invita a pensar que el próximo año vaya a ser el del boom del mercado, más bien puede haber una corrección cercana al 7%', añade.
El banco ABN Amro enumera los factores que amenazan con apagar en 2004 el entusiasmo actual de la economía: 'Debido a que el estímulo político se debilitará, algunos desequilibrios estructurales volverán a aparecer, como el crecimiento de la deuda de las compañías y de la economía doméstica, la rigidez del déficit por cuenta corriente y el persistente exceso de capacidad'. Goldman Sachs mantiene una proyección de crecimiento del 4% para el cuarto trimestre, ante 'el descenso del consumo y el incremento del déficit comercial'.
Las ganancias de los grandes índices en los últimos 30 días son reveladoras del tono actual de Wall Street. El Dow ha ganado un 0,8%, el S&P, un 0,2% y el Nasdaq un 0,4%.
Factores de riesgo. Armas de crecimiento de doble filo
Récord de beneficio en las empresasEl aumento promedio de las ganancias en la segunda mitad del año alcanza un ritmo del 20%, frente a la ratio histórica del 7%. Un compás que los analistas consideran insostenible a medio plazo y que, de hecho, fue descontado a lo largo de los primeros meses del año. Por ejemplo, las acciones de IBM cayeron un 4% la semana pasada, pese a registrar unos buenos beneficios.Maniobras fiscales para el consumoLa reducción de impuestos aprobada por la Administración ha permitido que la renta personal disponible pasara de crecer un 0,6% de mayo a junio a un 2,2% de julio a agosto. El gasto de los consumidores representa el 70% de la economía y su fortaleza ha permitido a EE UU sortear la crisis de 2000 y 2001. La pregunta es qué pasara cuando se agote la baza del recorte fiscal.Recuperación con alto desempleoLa tasa de paro alcanza al 6,1% de la población activa, un nivel preocupante en EE UU, el desempleo ha crecido un 50% desde que George Bush asumió la presidencia en enero de 2001. Las cifras de peticiones de subsidio por desempleo han superado en tres de las últimas cuatro semanas la barrera que delimita la creación de la destrucción de empleo.El descenso en picado del dólarEl euro ha ganado un 19,8% frente al dólar en los últimos 12 meses, hasta el nivel de 1,16 dólares por cada moneda única. Los especialistas consideran que, de momento, el ajuste de la moneda proseguirá hasta alcanzar las 1,2 unidades por euro. La corrección del dólar está producida por la necesidad de atraer capital para corregir los fuertes desequilibrios en la balanza de pagos.
Los bonos del Tesoro mantienen la buena salud
Los comentarios del secretario del Tesoro de EE UU, John Snow, sobre una posible subida de los tipos de interés (ahora en el 1%) no han afectado al rendimiento de los bonos, ya que lo que los inversores tienen en cuenta es el entorno de fuerte repunte del PIB y descenso de la inflación.El interés de los bonos se mantiene en el 4,36%, lejos del mínimo anual del 3,11% registrado en junio. Pero la cautela es necesaria. La gestora Mellon Investments cita cinco factores para anticipar un descenso en el rendimiento de los bonos: la posición de los gestores, la apreciación del yen, el reajuste en el mercado hipotecario, las expectativas de inflación y el entorno del mercado laboral.