Francia pide al Eurogrupo tolerancia con el déficit hasta superar la crisis

París pidió anoche tolerancia con el déficit público hasta que se aleje el 'contexto recesivo' de su economía. Francia atribuye a la débil coyuntura sus dificultades para respetar el Pacto de Estabilidad y confía en esquivar así las sanciones por violar las normas por tercer año consecutivo.

El ministro francés de Economía, Francis Mer, llegaba anoche a Luxemburgo para intentar convencer al Consejo de Ministros de la zona euro de que el déficit publico galo se corregirá tan pronto como remonte la actividad económica. Mer confía en que su coartada coyuntural aplaque las iras de algunos de sus homólogos, que el viernes vieron impotentes cómo el ministro galo dejaba expirar el plazo de cuatro meses que le concedieron en julio para presentar medidas de contención del gasto público.

París cuenta con apoyos suficientes para esquivar el rigor del pacto. El ministro de Economía de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker, reiteraba ayer su oposición a imponer sanciones a Francia. 'Decir que se debe sancionar a Francia (...) no corresponde en nada a los múltiples desafíos a los que estamos confrontados', declaró Juncker. Pero el Eurogrupo debe buscar un compromiso que no soliviante a los países más ortodoxos fiscalmente.

Al comisario de Economía, Pedro Solbes, le correspondía anoche ejercer de fiscal presupuestario y, aunque admite el eximente de la caída del crecimiento, recuerda que sólo una pequeña parte del déficit francés puede atribuirse a la situación económica. El resto, insiste, se debe a una falta de control del gasto y a previsiones de ingresos basadas en utópicas hipótesis de crecimiento.

Francia ya violó en 2002 el Pacto de Estabilidad con un déficit del 3,1% del PIB y para este año prevé el 4%. Ayer mismo, el Ministerio de Economía francés anunciaba que el déficit público alcanzó en agosto de este año los 63.770 millones de euros, un 33,5% más que en el mismo periodo del año anterior.

La economía francesa bordea, además, la recesión técnica, según las previsiones presentadas ayer por el banco público Caisse de Dèpôts et de Consignations. A la caída del 0,3% del PIB en el segundo trimestre podría sucederle otra del 0,1% en el tercer trimestre, según las estimaciones de la Caisse. El primer ministro, Jean-Pierre Raffarin, aludía ayer en Moscú al actual 'contexto recesivo' de su economía.

Estos datos negativos pueden favorecer la tesis francesa a favor de invocar las 'circunstancias especiales' que el Pacto de Estabilidad contempla como justificante de un incumplimiento de los recortes del gasto.

Rato se muestra comprensivo con París

Las dificultades de Francia para domeñar el déficit público merecieron ayer, sorprendentemente, la comprensión de Rodrigo Rato. A su llegada a la reunión del Eurogrupo, el vicepresidente español elogió 'las reformas estructurales muy importantes' que ha acometido París. 'No son cosas fáciles en ningún país del mundo y, mucho menos, en uno europeo', afirmó Rato, que hasta ahora se había alienado con las tesis más ortodoxas de interpretación del Pacto de Estabilidad.El ministro parece alejarse del bando de torquemadas fiscales que quieren aplicar sanciones a Francia si no sitúa en 2004 el déficit público por debajo del 3%. Rato pidió que Europa haga 'un esfuerzo para evitar que el déficit excesivo lastre la recuperación económica con una subida de los tipos de interés a largo plazo'.