Los inversores siguen dando la espalda a los fondos de Bolsa
Los mercados de renta variable siguen aportando las mayores ganancias a los fondos de inversión a pesar del relativo desinterés con el que los inversores contemplan las tomas de participaciones en los fondos especializados en las Bolsas.
Desde que comenzó el año, los fondos bursátiles han registrado crecimientos de patrimonio muy modestos, ya que las masivas entradas de dinero que están registrando los fondos siguen apostando por las opciones más conservadoras del abanico de posibilidades que ofrece la inversión colectiva.
Se puede decir ya a estas alturas del año que los inversores que canalizan su ahorro a través de los fondos de inversión se han dejado escapar la parte más sustancial de la subida de la Bolsa en el presente año. Los mercados domésticos de renta variable presentan a estas alturas del año unas ganancias del orden del 20% y, aunque no se debería descartar un nuevo impulso alcista de los mercados de aquí a finales de año, la parte básica de la ganancia de las Bolsas puede considerarse ya asimilada.
Los fondos que invierten en la Bolsa española arrojan a estas alturas del año una rentabilidad media del 20%, aunque ganancias superiores se encuentran en fondos que actúan en mercados más dinámicos este año.
Una treintena de fondos lidera en la actualidad las ganancias del conjunto de los fondos con rentabilidades acumuladas en el año superiores al 30%, unas ganancias que sólo los mercados de renta variable pueden aportar.
Los motores de los fondos bursátiles siguen siendo los mismos que en las últimas semanas, es decir, las compañías tecnológicas, los mercados emergentes y la Bolsa japonesa, tres segmentos de los mercados que se están beneficiando de forma anticipada de las expectativas de la recuperación económica que se espera para los próximos meses.
No obstante, los mercados variables están reflejando de muy diversa forma estas expectativas. Las dos últimas semanas, la distancia que caracteriza a las Bolsas de Estados Unidos y de Europa se ha vuelto a agrandar, de forma que hay ya unos diez puntos de diferencia de rentabilidad entre un mercado y otro, en especial cuando se consideran los segmentos más dinámicos del mercado norteamericano, como es el caso de las compañías tecnológicas.
Una diferencia que parece reflejar con cierta exactitud la existente entre las economías de ambas zonas y su ritmo de recuperación. Los fondos que invierten en estos mercados presentan en todo caso unos diferenciales de rentabilidad bastante en línea con estas distancias ya que los fondos españoles que invierten en la zona euro rentan por término medio un 11,7% frente a rentabilidades por encima del 20% en el caso de los fondos tecnológicos.
El diferencial de rentabilidad se refleja también en las comparaciones con otros mercados, como el de países emergentes o en de las Bolsas de Japón, beneficiados todos ellos por unas mejores expectativas de crecimiento económico frente a la escasa confianza que los inversores tienen depositada en la economía europea, al menos en el corto y medio plazo. Los fondos en países emergentes ganan ya en lo que va de año más del 23%.
La rentabilidad media está todavía en el 3%
La rentabilidad media de los fondos de inversión españoles, en su conjunto, no termina de despegar. En lo que va de año, esta rentabilidad se ha situado en el nivel más alto durante los últimos días, al rebasar ligeramente el umbral del 3%, todo ello a pesar de las ganancias bursátiles acumuladas en los tres últimos meses.El motivo de tan escasa rentabilidad global es el peso ampliamente mayoritario que tienen los fondos de tipo conservador (y por lo tanto de baja rentabilidad) en el conjunto de la inversión colectiva.Un peso que, además, se ha agudizado este año debido a que la casi totalidad del dinero que ha entrado ha ido hacia los fondos monetarios y de renta fija a corto plazo además de apostar por los fondos garantizados, todos los cuales presentan rentabilidades muy escasas.