Argentina suspende pagos en la deuda con el FMI
Al igual que el año pasado, el país suramericano ha incurrido en un nuevo incumplimiento de pago con un organismo financiero internacional. El 14 de noviembre de 2002, el Gobierno del ex presidente Eduardo Duhalde se negó a efectivizar un vencimiento de 805 millones de dólares y pagó sólo 79,2 millones correspondientes a intereses de esa deuda.
Ahora, en medio de una durísima negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el presidente Néstor Kirchner ha decidido no utilizar sus reservas internacionales de 13.300 millones de dólares para cumplir con el organismo. Con un argumento exactamente igual al de noviembre pasado, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo ayer que 'no vamos a pagar con reservas porque no estamos en condiciones objetivamente de hacerlo'.
Argentina busca un pacto con el FMI para postergar deudas con el organismo por 12.500 millones de dólares que vencen de aquí a septiembre de 2006, ya que su economía no genera recursos para cumplir con esas obligaciones. El anterior acuerdo de corto plazo entre el Fondo y el país suramericano venció el pasado 31 de agosto.
Pero las conversaciones, que parecían bien encaminadas, se trabaron en los últimos tres días por diferencias fundamentales sobre el nivel del superávit fiscal primario, el aumento de tarifas a las firmas de servicios públicos privatizados y la compensación a los bancos por la devaluación y la pesificación asimétrica de enero de 2002.
De cualquier manera y al igual que en noviembre del año pasado, el Gobierno argentino y el FMI seguirán negociando y antes de 30 días el organismo no considerará al país en suspensión de pagos. Sólo en el caso de que Argentina no pague en este plazo, lo que supone que no firmará un acuerdo con el Fondo, entonces sí quedaría fuera del circuito de créditos de todos los organismos financieros, incluida la pérdida de las ayudas ya concedidas por el Banco Mundial.
'Si Argentina demora por un par de semanas el pago mientras negocia los últimos detalles del acuerdo, y creo que eso es lo que hará, no habrá grandes implicaciones sobre Argentina', aseguró Allan Meltzer, profesor de la Carnegie Mellon University.
El ministro de Economía argentino, Roberto Lavagna y el presidente Kirchner recordaron ayer que no firmarán ningún acuerdo que no puedan cumplir. Si lo hicieran, 'sólo serviría para poner la economía en recesión y hacer incumplibles los acuerdos', dijo Lavagna.