Iberdrola reclamará a EDP la opción de compra sobre su 3% de capital
El anuncio del presidente de Electricidade de Portugal (EDP), Joao Talone, de la puesta en venta del 3% de Iberdrola pone fin a los largos intentos por cerrar una alianza entre ambas empresas cara a la creación del mercado único de electricidad en la península Ibérica. Talone, que nunca se mostró demasiado entusiasta con esa posibilidad, enmarcó la salida del capital de la compañía española dentro del plan de reducción de deuda asumido por EDP.
Además, la eléctrica portuguesa cuenta con otros objetivos estratégicos, así como con la obligación de mejorar su estructura financiera cara al aumento de la presencia de socios privados en su accionariado. Talone reconoció ayer que con el programa de desinversiones proyecta obtener 700 millones que se destinarán a la reducción del endeudamiento en un 10%.
Pero Iberdrola recordó horas después de conocerse las manifestaciones de Talone que mantiene derecho preferente de compra sobre sus acciones en poder de EDP, según el acuerdo suscrito por ambas compañías el 28 de mayo de 1998. Este pacto fija que ese 3% 'no son títulos de libre circulación' y que Iberdrola puede adquirirlos, siempre que no supere el límite de autocartera, o elegir una entidad para que tome esa participación.
No obstante, según añaden las mismas fuentes, lo más probable es que las dos eléctricas acuerden una acción coordinada. No parece en cualquier caso que vayan a registrarse dificultades para colocar esa participación, ya sea en inversores extranjeros o españoles; un ejemplo: las cajas valencianas CAM y Bancaja mostraron interés el pasado agosto por entrar en Iberdrola.
La empresa que dirige Ignacio Sánchez Galán no ha tomado, de momento, una decisión sobre el destino del 5% de EDP que tiene en su cartera de valores.
EDP, que no obtendrá elevadas plusvalías por la venta del 3% de Iberdrola (unos 25 millones de euros), presentó una reducción del beneficio del 21% en los seis primeros meses de este año respecto al ejercicio anterior hasta 182 millones. No obstante, Talone calificó a EDP como la eléctrica más equilibrada de la península Ibérica. Por su parte, Cantábrico obtuvo en ese periodo un beneficio neto de 30 millones, un 1,5% menos que el año anterior. Este ligero descenso en su resultado se produjo como consecuencia de una mayor generación eléctrica producida por las centrales hidráulicas y por el descenso de los precios en el mercado mayorista de generación (pool) que la penalizó.
Cantábrico es su única apuesta española
Cantábrico ha ganado fuerza en la estrategia de EDP para consolidarse como una empresa líder en el sector energético español. La firma portuguesa, a través de su máximo responsable, Joao Talone, aseguró hace apenas cuatro meses que su intención era controlar el 100% de la asturiana. Esta política convertiría a Cantábrico en su brazo ejecutor para ganar cuota en España, a la espera de que se diseñe definitivamente el mercado ibérico, un proyecto que se podría poner en marcha el próximo año. El anuncio de la venta de su 3% en Iberdrola parece que supone un nuevo aval a su plan de desarrollo. La tarea, en todo caso, no será fácil. La Administración española ha reclamado constantemente la privatización de EDP para validar su presencia en España y todavía tiene en cuestión la ejecución de sus derechos políticos en Cantábrico.