Europa podrá multar a las compañías aéreas que faciliten a EE UU los datos de sus pasajeros
La negativa de Bruselas a aceptar las exigencias de EE UU de que las aerolíneas con destino a ese país cedan los datos personales de sus pasajeros puede traer graves consecuencias para las compañías europeas. El rechazo de la CE, hecho público por boca del comisario Frits Bolkestein, abre la puerta para que las autoridades de protección de datos puedan sancionar a las compañías que colaboren con Washington.
Las compañías aéreas europeas pueden encontrarse muy pronto entre la espada y la pared. La negativa de la Comisión Europea a aceptar las exigencias de colaboración que Estados Unidos quiere imponer a estas empresas (que incluye el deber de ceder los datos personales del pasaje) ha abierto la puerta para que las autoridades de protección de datos de la UE puedan sancionar a las aerolíneas que colaboren con las autoridades estadounidenses. Varias compañías ya han manifestado su malestar por encontrarse 'a dos bandas' entre ambos reguladores, ya que Washington puede multarlas si no cumplen sus requerimientos, y Europa podrá hacer lo mismo si lo hacen. El motivo está en que la legislación europea de protección de datos es mucho más estricta que la estadounidense y, como ya ha adelantado el comisario europeo Frits Bolkestein, las pretensiones de Washington suponen una violación flagrante de esa normativa legal.
Pese a que todavía queda pendiente una reunión el próximo 22 de septiembre para intentar solucionar la situación, Bolkestein ya ha manifestado que Estados Unidos no ha aportado garantías suficientes sobre el uso que se hará de esa información. Así, según el comisario europeo, las demandas del Gobierno estadounidense afectan a 'derechos y libertades fundamentales que se protegen constitucionalmente en la ley de varios Estados miembros de la UE'.
La disputa entre la UE y Estados Unidos en este tema se centra en gran parte en la política de EE UU de reforzar la lucha contra el terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. Desde el pasado mes de marzo, Washington obliga a todas las compañías aéreas que vuelen a Estados Unidos a entregar los datos personales de los pasajeros, incluidos los nombres, preferencias de dieta o itinerario. La medida fue rechazada desde el principio por las autoridades europeas de protección de datos (en España, la Agencia de Protección de Datos) por considerar que dañaba gravemente el derecho a la intimidad de los ciudadanos europeos que volasen a aquel país.
Más de 60 referencias de cada viajero
Las compañías aéreas denominan PNR (Registro del Nombre del Pasajero, en sus siglas en inglés) a los archivos de datos que se contienen en las reservas de vuelos. Esa información, que hasta ahora estaba reservada a miembros de la industria (desde agencias de viajes hasta el servicio de facturación del equipaje) es la requerida por las autoridades estadounidenses desde marzo en todos los vuelos con destino, origen o escala en su territorio. Los datos que, según Bruselas, permiten realizar un verdadero perfil del pasajero, pueden superar hasta las 60 referencias e incluyen:1Nombre completo del pasajero y la dirección de su domiclilio.2Número de su tarjeta de crédito, cuando no haya pagado el pasaje en efectivo.3 Tipo de comida que degusta, algo que en ocasiones permite adivinar el credo religioso.4 Necesidad de asistencia especial, ya sea una camilla o una silla de ruedas, para realizar el vuelo.