La CMT dice a las operadoras que mejoren su oferta para frenar el avance del móvil
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) hace referencia por primera vez en su informe de 2002 al imparable ascenso de la telefonía móvil dentro del campo de la fija y al efecto sustitución que se ha extendido entre los usuarios, muchos de los cuales han optado por renunciar a una conexión de telefonía fija en sus hogares y funcionan sólo con el celular.
Aunque el organismo regulador no concreta en números este efecto -que otras fuentes cifran en 2,4 millones de hogares que han renunciado al fijo- sí da alguna referencia sobre los responsables, que no son otros que los operadores de telefonía básica. La CMT asegura que las telefónicas deben reflexionar sobre por qué hay clientes 'que no perciben que el valor que les ofrece un acceso fijo compense el precio' y deciden 'sustituirlo incluso por otro más caro'.
El organismo regulador que preside Carlos Bustelo da una recomendación para minimizar el impacto. Las operadoras deben 'dotar de valor estos accesos', mediante la introducción de servicios adicionales de banda ancha o interactivos. Ahí debería estar la clave, prosigue la CMT, para que, a medio plazo, 'pueda revertirse la tendencia actual de canibalización de la telefonía fija por la móvil'.
La comisión no tiene ninguna duda: la telefonía móvil es más cara que la fija. Y para demostrarlo da una serie de ejemplos sobre llamadas, aunque no incide en el efecto que tienen los precios de cuota de conexión y abono, que son gratis en la telefonía celular, pero no así en la fija.
Las comparaciones que aporta no dejan lugar a dudas. La media de las tarifas de contrato de los operadores móviles es un 58% más elevada que la de los operadores fijos en el ejemplo que pone la comisión, referido a llamadas interprovinciales.
Sobre el porqué de las preferencias de los usuarios por una forma de comunicación más cara, la CMT apunta a la comodidad, movilidad y 'quizá también moda social' como posibles responsables.