Graves daños por las lluvias torrenciales en Cataluña y Levante
Del calor al aguacero en apenas unas horas. Las comunidades de la cornisa cantábrica, Cataluña, Aragón y Valencia, dijeron adiós drásticamente a la ola de calor y registraron fuertes tormentas que causaron importantes daños materiales, cortes de suministro eléctrico y paralizaron el transporte ferroviario en algunos puntos.
En Cataluña, un desplome de aire frío simultáneo a las grandes tormentas que se produjeron en esta comunidad, causó importantes destrozos en ventanas y tejados de las casas y en el mobiliario urbano de varios municipios de las comarcas de Osona, Vallés Oriental y Bages, todos ellos en la provincia de Barcelona.
En la comarca de Osona, 6.000 abonados se quedaron sin luz debido a un tornado generado por las tormentas, mientras que en las ciudades de Tarrasa y Sabadell, el aguacero, produjo inundaciones de bajos y aparcamientos. En esta última localidad se registaron lluvias de 50 litros por metro cuadrado. Incluso en Barcelona capital, a eso de las 11:0 la ciudad quedó casi a oscuras por un apagón generalizado, causado por un intenso aguacero.
Sin trenes de cercanías
Las intensas lluvias provocaron también varios problemas en la red ferroviaria catalana. Durante la mañana, algunas líneas de Renfe subrieron cortes en el suministro eléctrico y sobre las 11:15 horas se suspendió el tráfico durante aproximadamente treinta minutos en todas las líneas de Cercanías, según informó la compañía.
La circulación de los trenes en le corredor del Mediterráneo, que enlaza Valencia con Barcelona, también se vió afectada, añadieron estas mismas fuentes.
Ya por la tarde, intensas tormentas de granizo causaron importantes daños en Alcañiz (Teruel), así como en las comarcas valencianas de Costera, la Safor y Vall d'Albaida. El interior de Valencia y Castellón ha recogido, entre las seis y las diez de la mañana de ayer, hasta 77,4 litros por metro cuadrado.