Cascos anuncia que la nueva terminal de Barajas estará terminada en febrero de 2004
El ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, ha anunciado hoy que la construcción de la nueva terminal del aeropuerto de Barajas concluirá en febrero del año próximo, mientras que la zona del campo de vuelo estará operativa en junio. Cascos asegura que en los tres años de las obras se han invertido de 3.973 millones de euros, cuando el presupuesto total de este proyecto es de 4.839 millones de euros.
El ministro ha acudido esta mañana al aeropuerto madrileño para inaugurar, junto al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, la plataforma del dique de la zona este, que forma parte de una gran aérea de estacionamiento y movimiento de aeronaves situada junto a la futura terminal 4.
Cascos ha destacado que los plazos de ejecución se están cumpliendo. La obra civil del nuevo área terminal y del edificio satélite estará en condiciones de ser puesta en servicio en febrero del próximo año, "aunque luego es necesario realizar un proceso complejo de instalaciones y de traslado de las empresas que van a hacer uso de las terminales". Además, "las plataformas y las dos pistas estarán operativas, calibradas e incorporadas a las cartas internacionales en junio de 2004". Eso permitirá que a finales del próximo año las nuevas instalaciones "serán una realidad".
Reubicación controvertida
El principal problema se centra ahora en la reubicación de las compañías en el nuevo edificio. Según publicaba recientemente Cinco Días, Iberia rechaza trasladarse a la terminal 4 junto con el resto de las aerolíneas integradas en la alianza One World, además de Spanair y las socias de ésta a través de Star Alliance. AENA también pretendía que las dos compañías vinculadas a Marsans operaran a través del nuevo edificio.
La patronal aérea, sin embargo, se opone frontalmente a que Iberia y sus coaligadas ocupe en exclusiva la terminal 4. En declaraciones del presidente de la Asociación Española de Líneas, Felipe Navío, recogidas por este periódico, critica que ¢unas nuevas infraestructuras construidas con dinero público, como son las de las nuevas terminales y pistas del aeropuerto de Madrid-Barajas no pueden asignarse a una sola empresa o grupo de empresas en una nueva variante de monopolio¢. En esta organización están integradas Spanair y Air Europa, pero no Iberia.