Las hipotecas a tipo variable copan el 97,6% del total
La caída de los tipos de interés en los últimos cinco años ha traído consigo no sólo el abaratamiento de las hipotecas. Este repunte ha impulsado también el cambio en las preferencias de los usuarios. Las entidades de crédito han triplicado en el periodo la cuantía de los préstamos de tipo variable y han reducido a la mitad los de tipo fijo.
El saldo vivo de las hipotecas a tipo variable pasó de 63.218 millones de euros en 1997 a 191.382 millones a final de 2002, un 259,6% más según el Boletín Económico del Banco de España publicado ayer. Paralelamente, los préstamos a tipo fijo cayeron en el mismo periodo de 10.454 a 4.597 millones, un 56% menos.
Para realizar estos cálculos, el organismo supervisor ha tenido en cuenta los préstamos realizados por 30 entidades, que suponen el 77,8% del crédito total, entre diciembre de 1997 y 2002.
El crecimiento experimentado por los tipos variables ha hecho que los créditos referenciados hayan cobrado un peso abrumador. A cierre del pasado ejercicio, estos préstamos suponían el 97,6% del total.
Según el Banco de España, la caída de los tipos de interés ha favorecido este cambio, cuyo inicio establece en 1994 con la aprobación de la ley sobre subrogación y modificación de préstamos hipotecarios, que permitió a los clientes sustituir los préstamos con altos tipos de interés contratados años atrás por los que comenzaron a ofrecerse entonces con tipos más bajos.
Asimismo, el estudio señala que el 89% de las hipotecas a interés variable se encuentran referenciadas a tipos oficiales, de los que los más utilizados son el mibor y el euribor (tipos a los que se prestan el dinero los bancos españoles y europeos), que aglutinan el 56%.
El Banco de España estima que esta preferencia se debe a que el mercado interbancario registra anticipadamente la evolución del precio oficial del dinero y calcula que en la actualidad en torno al 75% de los nuevos préstamos hipotecarios de vivienda utilizan el euribor como tipo de referencia.
De esta forma, el euribor ha ido relegando a otros indicadores como el tipo activo de referencia de las cajas, conocido como CECA, utilizado en el 1,71% de los préstamos, o como el rendimiento interno de la deuda publica entre 2 y 6 años, que sólo se usa en el 0,19% de las operaciones, debido a su 'escasa significación en el mercado'.