El mercado de renta fija apuesta por la recuperación
Lo que Alan Greenspan no parece tener del todo claro, los inversores sí. La renta fija lleva un mes de auténtica locura, que ha visto su fase más aguda a principios de semana, coincidiendo con el discurso del presidente de la Reserva Federal, y los últimos resultados empresariales, que en su mayoría han superado las previsiones.
Esta locura se traduce en un desplome de los precios de los bonos y una fuerte subida de la rentabilidad.
En EE UU la rentabilidad del T-Bond ha subido desde el 3,17% hasta el 3,98% en un mes. En los bonos de alemanes y español, el alza también ha sido importante, con rendimientos que han pasado a ser del 4,07% y 4,11%, respectivamente. La rentabilidad del bono alemán con vencimiento en 2013 tuvo entre el lunes y el martes el alza más alta en dos días desde 1995. El precio de la deuda en EE UU sufrió el martes la mayor caída desde marzo de 1996.
El hecho no coincide todavía con un trasvase de dinero hacia la renta variable. El Ibex y el Dow Jones han caído un 0,22% y 3%, mientras que el Dax ha ganado un 2%, aunque los analistas confían en que poco a poco ese flujo de dinero vaya entrando en la renta variable. 'El derrumbe de los mercados de la deuda nos comienza a preocupar. Y no es que no lo veamos lógico en un contexto de recuperación económica. Pero como los científicos necesitamos palparla para convencernos de que está ocurriendo', comentaba esta semana José Luis Martínez, de Citigroup. Desde que estallara la crisis en 2000 al hilo de la burbuja tecnológica, Bolsas y bonos han ido de la mano, una asociación incomprensible para los bolsistas.
Los datos estadísticos muestran que en la historia ha pasado de todo. Según un estudio de Smith Barney, en el desplome de los bonos en Europa en 1980 el mercado bajó una media del 25%, en el de 1998, subió un 21%, en el de 1994 bajó un 9%, y en el de 1999 subieron el 33%.
Mientras, el dólar está aprovechando la coyuntura actual y ha ganado posiciones frente al euro y el yen. Ayer cerró sobre las 0,89 unidades euros, el nivel más alto en dos meses.
El mercado de bonos vivió ayer otra jornada de gran agitación por los últimos datos económicos de EE UU. Algunos, como las peticiones iniciales del seguro de desempleo, han estado por debajo de las previsiones de los analistas. El dato avala lo que la renta fija cotiza; recuperación económica y subida de tipos a largo plazo.