La producción industrial registra el menor aumento en nueve meses
Los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas no permiten un gran optimismo respecto al estado del sector industrial. El índice de producción industrial (IPI) cayó el 1,3% el mes pasado, aunque descontado el efecto del calendario, aumentó el 0,4% respecto al mismo mes del año anterior.
'El dato de mayo es negativo', aseguraba el economista del Banco Urquijo Alfonso García Yubero. Para Nuria García, economista de Ahorro Corporación Financiera, la situación del sector es de 'cierta debilidad'.
No en vano, se trata del menor crecimiento desde el pasado mes de agosto y la producción de bienes de equipo, que se considera un importante barómetro de la futura fortaleza de la economía, cayó el 1,6% en términos desestacionalizados, un claro cambio de tendencia después de haber registrado tres meses de subidas.
El dato contrasta con el optimista escenario dibujado el pasado jueves por el Banco de España, que apuntaba en su boletín económico que en el segundo trimestre se mantuvo el crecimiento del PIB del 2,1% alcanzado por la economía en los primeros tres meses del año.
La interpretación del Ministerio de Economía mantiene el optimismo avanzado por el Banco de España y destaca que la continuidad del crecimiento de la industria confirma la recuperación que muestran otros indicadores recientes de la actividad económica, entre los que cita el empleo, la afiliación a la Seguridad Social, el consumo de electricidad, las ventas de automóviles y la confianza de los consumidores.
Sectores
Por sectores, la producción de bienes de consumo aumentó el 0,3%, con una reducción del 3,8% para los duraderos y un aumento del 0,9% para los no duraderos). La producción de bienes intermedios subió el 1,4% y la de la energía se incrementó un 0,8%.
Durante el periodo enero-mayo, la tasa media del IPI aumentó el 1% sobre igual periodo de 2002. Esta tasa media creció el 0,1% en los bienes de consumo (en los de duraderos se redujo el 2,4% pero en los de consumo no duradero aumentó el 0,5%). En los bienes de equipo el IPI disminuyó el 0,3%, en los bienes intermedios aumentó el 2,3% y en la energía, el 0,9%.
Las tasas de producción industrial se incrementaron especialmente en el periodo enero-mayo en las actividades relacionadas con la industria química así como en las coquerías y el refino de petróleo, con respectivos aumentos del 6,5%.
En el lado opuesto se situaron actividades como la fabricación de máquinas de oficina y equipos informáticos, con una reducción de la producción industrial del 32,5% y la producción de material electrónico, de equipo y aparatos de radio, televisión y comunicaciones, con un descenso del 12,1%.
Por áreas geográficas, el aumento de la media de la producción industrial hasta mayo destacó en Extremadura (13,1%), seguida de Castilla y León (7,5%), mientras que en el lado opuesto se situaron Asturias y Baleares, con respectivos descensos del 5,4%.
El momento en el que el ajuste llegará a su fin
'Esperamos una mejora de la industria en los próximos meses porque pensamos que la corrección de la sobrecapacidad productiva está llevado a su fin y porque las condiciones monetarias son relajadas', aseguraba Alfonso García Yubero, economista del Banco Urquijo.Lo cierto es que, desde el punto de vista de los tipos de interés, la industria puede esperar poco más por parte del Banco Central Europeo (BCE).El pasado jueves, el presidente del BCE, Win Duisenberg, echó por tierra las esperanzas de un nuevo recorte de tipos, al asegurar ante el Parlamento Europeo que la entidad ya había hecho todo lo posible para garantizar el crecimiento económico.No obstante, los analistas siguen apostando por un nuevo descenso de tipos en un plazo de entre uno y tres meses, en función de la evolución de la economía. A ello también contribuirá la fortaleza del euro, un elemento que Bruselas ya reconoce que daña a las exportaciones.