Los exportadores sacrifican beneficio para mantener las ventas
Los resultados de la encuesta de coyuntura de la exportación del Ministerio de Economía venían a confirmar ayer las apreciaciones avanzadas el miércoles por la Comisión Europea, en su informe trimestral, respecto a la caída de los márgenes de beneficios de las empresas exportadoras europeas para mantener su cuota de mercado exterior.
Afectados por la desaceleración de la demanda en los principales mercados internacionales, las incertidumbres de la guerra de Irak y, en menor medida, por la fortaleza del euro, el 78% de los exportadores españoles reconoce que está manteniendo o reduciendo sus márgenes de beneficio comercial, frente a sólo un 7% que declara tener mayores beneficios por sus ventas en el exterior.
Este ajuste de los beneficios afecta especialmente a las empresas de materias primas, bienes de consumo y automóvil, mientras que el sector con mejores resultados es de alimentación, con un 23% de las empresas del sector que admite una mejora de los márgenes de exportación.
La encuesta, realizada entre el 21 de abril y el 6 de mayo últimos entre 1.003 empresas exportadoras de todas las comunidades autónomas y sectores de actividad, refleja también cómo el 57% de los encuestados considera que el beneficio comercial de exportación ha sido igual o inferior al obtenido en el mercado interior y sólo el 10% estima que ha sido superior.
Estos resultados suponen un evidente empeoramiento respecto a los del último trimestre de 2002, al descender dos puntos porcentuales las empresas que declaran un margen superior en las exportaciones, mientras que aumentan del 17% al 22% las que admiten mayores beneficios por sus ventas en el mercado nacional.
Cartera de pedidos
Respecto al comportamiento de los precios de exportación de la propia empresa durante el primer trimestre de 2003, casi la mitad de los entrevistados, el 48%, afirma que se mantuvieron estables, frente a un 24% que se vieron obligados a rebajar sus precios y el 18% que subieron. La caída de los precios se concentra, de forma más acusada entre las empresas de bienes de consumo y automóvil y entre las que tienen una facturación superior a los 30 millones de euros.
Mucho más favorables son los resultados de la encuesta que realiza trimestralmente la Secretaría de Estado de Comercio respecto a la evolución de la cartera de pedidos para exportación hasta abril del año próximo.
En concreto, el 60% de las empresas consultadas declara una evolución al alza en sus pedidos exteriores, frente a un 31% que afirma que se mantendrá estable y sólo un 6% que asegura que evolucionará a la baja.
Comparando estos resultados con la cartera de pedidos actual se observa un aumento del 38% en las empresas que reconocen tener una cartera al alza y un descenso del 32% entre aquellas que se pronuncian a la baja. Una evolución de expectativas que, en opinión del secretario general de Comercio Exterior, Francisco Utrera, 'está en línea con la esperada recuperación de la economía y del comercio mundial para el segundo semestre del año'.
Esta recuperación es especialmente acusada en el sector de la energía, donde el aumento de la cartera exterior afecta al 97% de las empresas, y en los de bienes de equipo y automóvil, en los que el incremento de pedidos para exportación se produce en el 70% y el 65% de las empresas, respectivamente.
El dinamismo de estos dos últimos sectores es especialmente relevante para nuestro sector exterior, dado que, por sí solos, aportan el 42% del total de las exportaciones españolas.
En sentido contrario, los sectores menos optimistas son los de materias primas, con sólo un 30% de las empresas que tienen expectativas de pedidos al alza, y alimentación, con un 47%.
Por destinos geográficos, el 96% de las empresas declaró haber exportado a países de la Unión Europea, aunque sólo un 39% de los encuestados declara un aumento de sus expectativas de pedidos en estos mercados, frente al 46% que cree que permanecerán estables y un 14% que irán a la baja. Un resultado que revela las cautelas de los exportadores españoles respecto a la recuperación de Francia y Alemania.
En el resto de las regiones predominan las expectativas estables, con las excepciones de Europa del Este, donde las previsiones alcistas son mayoritarias, afectando al 53% de las empresas que exportan a estos mercados.
El euro perjudica en alimentos y bienes de consumo
Aunque la evolución de la demanda interna y la guerra de Irak son los factores que las empresas citan mayoritariamente entre los que más han influido negativamente en sus exportaciones durante el primer trimestre, la encuesta presentada ayer muestra un crecimiento significativo de las preocupaciones por el tipo de cambio, derivado de la fortaleza del euro frente al dólar.Así el tipo de cambio se sitúa ya en el tercer lugar entre los factores que afectan negativamente a las exportaciones, siendo el más importante para un 8% de las empresas exportadoras, frente a sólo el 1% en el último trimestre del año pasado.Más significativo es el hecho de que uno de cada cuatro exportadores asegura que la contribución del tipo de cambio a su actividad exterior ha empeorado entre enero y marzo de 2003, siendo esta opinión mayoritaria entre las empresas de alimentación (42%), semimanufacturas (36%) y bienes de consumo (35%, y entre las pequeñas empresas con una facturación inferior a 30 millones de euros.Respecto a la demanda externa, el 43% de las empresas encuestadas considera que su contribución a la actividad exportadora ha sido igual que los tres últimos meses de 2002, mientras que este factor mejoró para un 27% y empeoró para el 30%.La percepción de que la demanda exterior ha empeorado tiene mayor incidencia en las empresas de bienes de equipo, mientras que la sensación de mejora se concentra en los sectores de semimanufacturas y materias primas.