Zapatero pregunta a Aznar si conocía la trama de Madrid
¿Ninguno de ustedes lo sabía, señor Aznar?, le preguntó ayer José Luis Rodríguez Zapatero al presidente del Gobierno sobre las interioridades de la trama que ha impedido a Rafael Simancas presidir el Gobierno regional.
Zapatero hizo durante el debate del estado de la nación un breve relato de la presunta implicación de militantes y dirigentes del PP en la trama que ha impedido gobernar a Rafael Simancas. Una vez finalizado, preguntó a José María Aznar y al banco azul si conocían lo que iba a pasar en la Asamblea madrileña, tras recordarles que ninguno de los nombres que han salido hasta ahora a la luz ha sido objeto de expediente o de sanción.
La estrategia de Aznar consistió en evitar los detalles de la trama, que definió como 'un chismorreo de barrio'. El presidente optó por cuestionar abiertamente el liderazgo de Zapatero al frente de su partido y presentó lo sucedido en Madrid como un problema interno del PSOE que ha tratado de desviar hacia las instituciones. 'Yo sé que no seré candidato en las próximas elecciones. Lo que no se es si va a serlo usted', le espetó Aznar a Zapatero con evidente gesto de desprecio.
El presidente acusó al líder de la oposición de carecer de 'proyecto y alternativa' e interpretó la deserción de los diputados Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez como producto 'de las facturas' que habría tenido que pagar Zapatero por su elección como secretario general del PSOE en el 35º Congreso. 'Busque la responsabilidad de lo ocurrido en su propio partido y deje de lanzar insidias y juicios de intenciones', le dijo Aznar. 'Si no regenera pronto su propio partido, hay quien tendrá ganas de regenerarle a usted antes de tiempo', le atacó. '¿Quién le hace caso'?, le preguntó al líder de la oposición tras recordarle los problemas surgidos en algunas federaciones socialistas con los pactos poselectorales del 25 de mayo.
Presidente sin credibilidad
Zapatero presentó a Aznar como un líder político sin palabra ni credibilidad. En este contexto, recordó su gestión en Castilla y León, donde un viceconsejero de la Junta fue condenado a nueve años de inhabilitación, y el caso Gescartera, en el que no asumió responsabilidades políticas pese a la dimisión de un secretario de Estado de Hacienda y de la presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Entre las 'mentiras' que acumula el PP en el caso Tamayo, dijo Zapatero, figuran las declaraciones iniciales del secretario general del partido en Madrid, Ricardo Romero de Tejada, sobre el desconocimiento de los constructores que reservaron sendas habitaciones de hotel a los diputados tránsfugas. También recordó Zapatero que Romero de Tejada, 'un hombre de Rato', afirmó tener una vaga amistad con el abogado José Esteban Verdes, asesor de Tamayo, con quien habló en varias ocasiones el mismo día en que este último consumó la traición.
'Coincidencias, mentiras y silencio es igual a culpabilidad', sentenció el líder socialista, quien no desveló nuevos detalles sobre la trama.