La Inspección previene del mal uso de las sociedades profesionales
Tras el fin de la transparencia fiscal para las sociedades integradas por profesionales, los inspectores de Hacienda temen que este tipo de entidades puedan ser utilizadas ahora para realizar operaciones de planificación fiscal y avivar así el fraude. Según se puso ayer de manifiesto durante el III Encuentros Tributarios sobre sociedades patrimoniales y la nueva Ley General Tributaria, que ayer celebró la Asociación Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado, bien podría ocurrir que se creara una sociedad que, diciendo que es profesional no realice actividad alguna, simplemente para beneficiarse de su régimen.
Asimismo, los inspectores analizaron el nuevo régimen que se aplica a las sociedades patrimoniales, esto es, esas sociedades que se dedican únicamente a la gestión de un patrimonio personal. En opinión de Ángel Serrano, inspector de la Oficina Nacional de Inspección, la nueva regulación 'tiene zonas oscuras y recovecos que pueden dar lugar al uso de sociedades patrimoniales como instrumento de planificación fiscal'. Como un simple ejemplo, señaló el hecho de que están gravadas a un 40%, en tanto que, en el IRPF fácilmente alcanzarían el 45%.
Valor de mercado
En opinión de José Ramón Rodicio, inspector de Hacienda en excedencia, no sólo el nuevo régimen de las sociedades patrimoniales puede ser problemática, sino que el régimen transitorio previsto deja bastantes incógnitas abiertas. Una de ellas es saber qué pasa cuando en lugar de liquidar y disolver una sociedad, como así prevé la norma, se realiza una cesión total del activo a uno o varios de los socios que continúan en la actividad. En su opinión, aquí hay una puerta abierta para no pagar IVA ni tampoco los impuestos que tradicionalmente se aplican, pero que por el régimen transitorio están exentos. Al margen de cuestiones técnicas, los inspectores manifestaron su temor ante el aumento de la conflictividad que podrá general el nuevo régimen.