ETA asesina a dos policías en Navarra cinco días después de las elecciones
ETA eligió ayer una pequeña localidad navarra de 5.000 habitantes, Sangüesa, para evidenciar que no está en tregua. Una bomba lapa colocada en el coche de tres policías nacionales acabó con la vida de dos de ellos e hirió de gravedad al tercero.
El atentado se produjo al mediodía, cuando los tres agentes habían concluido su jornada de trabajo en la casa de la cultura de esta pequeña población navarra, donde acudían cada mes y medio para tramitar los documentos nacionales de identidad de los vecinos. Al arrancar su vehículo hizo explosión una bomba lapa fabricada con unos tres kilos de dinamita. Testigos presenciales informaron que el coche salió despedido por los aires, mutilando los cuerpos de los tres policías. Dos de ellos murieron en el acto, mientras que el tercero fue trasladado con heridas muy graves a un centro hospitalario, en el que también ingresó herido un trabajador de Telefónica.
Se trata del segundo atentado mortal de ETA en lo que va de año y se produce cinco días después de la consulta electoral que dejó el Ayuntamiento de Sangüesa en manos de la Agrupación Independiente de San Sebastián, una formación de carácter conservador cercana a la Unión del Pueblo Navarro. El segundo partido más votado fue el PSOE, seguido de IU. Los votos blancos, promovidos por las plataformas cercanas a la antigua Batasuna, sumaron sólo el 2%.
La reaparición criminal de ETA después de tres meses sin atentados desmiente los rumores de tregua que emergieron días antes de finalizar la campaña electoral, basados en un supuesto acuerdo entre la banda y el Partido Nacionalista Vasco, orientado a facilitar el desarrollo del Estado libre asociado que contiene el denominado Plan Ibarretxe. El portavoz de este partido, Joseba Egibar, enjuició ayer el atentado como el 'mentís macabro de ETA de que existen pactos extraños y secretos'.
El asesinato de los dos policías marcó ayer la agenda política. El presidente del Gobierno, José María Aznar, suspendió el viaje que tenía previsto emprender a San Petersburgo para intervenir en la cumbre UE-Rusia. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, anuló una rueda de prensa que iba a ofrecer sobre la catástrofe aérea de Turquía en la que perdieron la vida 62 militares españoles. Entre la larga cadena de comunicados de condena del atentado figura uno de la Comisión Europea. Los reyes enviaron telegramas de pésame a las familias de los policías muertos.
Ayer fue descubierto el robo de 300 pistolas que eran trasladadas a Irún en un camión procedente de la localidad alemana de Stuttgart. La policía sospecha que la autoría puede corresponder a ETA. El robo se produjo en una de las paradas efectuadas por el vehículo en el suroeste francés.