Acerinox confía en una subida de precios y un repunte de las inversiones
El ejercicio 2002 supuso una nueva era para el grupo Acerinox, tercer productor mundial de acero inoxidable, con la integración de la acería de North American Stainless en la factoría de Kentucky (Estados Unidos) y la incorporación de la surafricana Columbus Stainless. Esta compañía fue adquirida a través de un intercambio accionarial que supuso la entrada de Angloamerican, Samancor y la agencia gubernamental surafricana IDC en el capital de la compañía española con una participación del 8,8%. Acerinox tiene la opción de hacerse, en un plazo de cinco años, con el 100% de la empresa surafricana, que volvió a los beneficios el pasado ejercicio tras arrastrar una situación deficitaria desde 1996.
A pesar de la buena marcha de la cartera de pedidos de la compañía, en el primer trimestre del año, la actividad del grupo español, que ya tiene presencia en tres continentes, se ha visto afectada, según reconoce la propia compañía, por la incertidumbre económica general, sobre todo en lo que respecta a la demanda de chapa gruesa, pletina y productos largos, que se utilizan fundamentalmente en bienes de equipo.
Los precios se han mantenido estables en Europa, según la empresa que preside Victoriano Muñoz, mientras que han aumentado en Asia. Sin embargo, esa situación no ha sido suficiente para compensar la subida de costes que se ha registrado desde principios de año en energía, materias primas, gastos laborales, etc., y, especialmente, el impacto de la devaluación del dólar en los últimos meses.
Previsiones
La compañía espera que, una vez finalizada la guerra en Irak, se produzca un paulatino repunte de las inversiones industriales y de todo orden y que eso se traduzca en una mejora de precios de los aceros inoxidables.
La junta de accionistas de la compañía, que se celebrará hoy, tiene previsto aprobar una reforma de los estatutos con el fin de adaptar el funcionamiento del comité de auditoría a los términos de la nueva ley, aprobada el pasado mes de noviembre.
Además de la aprobación de los dos dividendos a cuenta, la compañía va a proponer a sus accionista la devolución de aportaciones con cargo a la prima de emisión. El primer dividendo a cuenta de los resultados de 2002 se pagó el pasado 3 de enero, y era de 0,23 euros brutos. Posteriormente, el 4 de abril, se abonó un segundo pago, por el mismo importe.
Acerinox cerró ayer a 31,39 euros, con una subida del 0,61% respecto a la jornada anterior. En lo que va de año ha perdido un 11,7%.