Modernización y asociacionismo, las recetas para competir
La regulación de los horarios comerciales es el principal punto de discrepancia entre las propuestas de los dos grandes partidos en sus programas para los comicios de mayo. Así, mientras que el Partido Popular apenas menciona esta cuestión y apuesta por mantener la situación actual hasta el año 2005, el PSOE defiende con rotundidad 'frenar el proceso de liberalización de horarios comerciales, a fin de evitar la eliminación del comercio tradicional. 'Las ampliaciones de horarios se deben hacer bajo el consenso de los comerciantes y consumidores', señala el programa socialista , que plantea también realizar estudios de impacto previos a la autorización de nuevas grandes superficies.
El partido socialista también propone potenciar todas las medidas de asociacionismo económico (cooperativas, centrales de compra, etc.); impulsar un plan de entornos comerciales de calidad urbana que incluye iniciativas como planes de peatonalización y la promoción de una red integrada de los pequeños comercios; promover planes específicos para renovación de equipos y aplicación de sistemas informáticos, y aprobar un Plan Integral de Seguridad Ciudadana dirigido especialmente a los sectores del comercio, hostelería y transporte de viajeros.
Insisten, finalmente, en la necesidad de 'imbricar los comercios tradicionales con el turismo' a través de guías de mercados; potenciar la venta ambulante de calidad; perseguir los mercados ilegales, e implantar nuevos instrumentos de financiación para asegurar los créditos, con programas de préstamos y microcréditos, fondos de capital semilla, riesgo y similares, y otras iniciativas de banca social y ética,
Modernización y asociacionismo son también los conceptos sobre los que gira el programa del PP que en el campo de la modernización propone elaborar un Plan Integral de Mercados y fomentar medidas de cooperación entre los pequeños comerciantes, como la creación de centros comerciales abiertos y la mejora de las infraestructuras de apoyo a los espacios comerciales.
También plantea el PP el apoyo a los formatos comerciales innovadores y en particular al de franquicia; impulsar la competitividad, 'apoyando la financiación de instalaciones y reformas, la formación y la elección de ubicaciones', y fomentar la calidad y la especialización del pequeño comercio 'como vía principal para el desarrollo futuro del sector'.
Cuestión relevante para el Partido Popular es la solución a los problemas derivados de la generalización del pago con tarjetas de crédito, para lo que impulsará el aumento de la transparencia y medidas para rebajar las comisiones cobradas por el uso de las tarjetas. Proponen para ello que la comisión que cobra el emisor de una tarjeta al banco en el que el comerciante ingresa el dinero de la venta responda a los costes reales de la prestación del servicio, con el objetivo de lograr un abaratamiento de este medio de pago.
Por último, se compromete a elaborar planes de apoyo a la modernización y la creación de pequeños comercios en los núcleos rurales.