Hojiblanca dedica un museo al aceite
La cooperativa Hojiblanca, líder en España en la comercialización de aceite de oliva virgen extra, inauguró el viernes en sus instalaciones de Antequera (Málaga) un museo del aceite, cuyas joyas son una almazara completa del siglo XVII y dos molinos de los siglos I y XIX.
La almazara del siglo XVII conserva, junto a la prensa de viga y contrapesos, todos los aperos de la época para elaborar aceite: la bodega de tinajas -algunas firmadas por los maestros alfareros-, lañas, cuerdas, pletinas, clavos, el mecanismo por el que discurría el aceite y hasta nidos de avispas terrizas adheridos a la viga de la prensa.
Hojiblanca ha invertido más de dos millones de euros en este proyecto 'que está en su inicio', apunta el gerente, Antonio Luque. El propósito de la aceitera es recopilar todos aquellos objetos que hagan posible recorrer la historia del aceite y el olivar. Además, incorporará un parque de oleáceas, para el que Hojiblanca ya tiene disponibles algo más de un centenar de variedades de olivos.
La apertura del museo del aceite coincide con la estrategia desplegada por la firma para reforzar su imagen corporativa y marca. 'Queremos mantener nuestro patrimonio histórico y cultural y usarlo para llegar a la sociedad', indica Antonio Luque.
La intención es dar a conocer 'lo que hay detrás de la marca' como fórmula para fidelizar a los clientes. Por esta razón, también se han previsto actividades complementarias como la iniciación a la cata de aceites, visitas a explotaciones olivareras o a alguna de las 23 almazaras del grupo.
Hojiblanca es una cooperativa bajo la que se agrupan otras 23 productoras de aceite y 11.000 agricultores que cultivan 90.000 hectáreas de olivar. La firma produce anualmente una media de 40.000 toneladas de aceite y factura por encima de los 120 millones de euros.
La empresa ha sido una de las primeras en desafiar el maleficio que pesa sobre el sector del aceite de oliva español: la producción a granel para las grandes multinacionales. Actualmente envasa y comercializa con marca propia cerca del 40% de su producción. El objetivo es alcanzar el 60% 'y el resto, seguir distribuyéndolo a granel, porque únicamente nos interesa el aceite de gran calidad'.
En este momento presume de liderar el segmento del aceite de oliva virgen extra, con una cuota de mercado del 16%, 'el doble que Koipe'. Además, ha empezado a exportar.
Aunque las ventas en el exterior apenas representan el 10% de la producción envasada, la marca Hojiblanca se distribuye en casi una treintena de países, desde la Unión Europea, Estados Unidos, Latinoamérica, Oriente Próximo, África y China.
'El consumo en el exterior es escaso porque el producto aún no se conoce bien', justifica Antonio Luque, aunque hay algunas zonas que 'empiezan a funcionar muy bien, como China'. Sin embargo, la cooperativa acaba de suspender una campaña comercial en el país asiático a consecuencia de la neumonía atípica.