Wall Street retoma las ganancias por los buenos resultados empresariales
La Bolsa de Wall Street, que abrieron la sesión con una clara tendencia bajista, han dado un giro de 180 grados a media mañana y han entrado en números positivos, lo que refleja la falta de dirección de los mercados. A las 19.00 (hora española), el índice Dow Jones de Industriales recuperaba un 0,51%, hasta los 8.3871,47 puntos, mientras que el tecnológico Nasdaq subía un 0,68%, hasta los 1.434,03 puntos.
Los analistas temen que muchos de estos beneficios hayan sido generados con resultados atípicos, y no con un crecimiento de los ingresos, lo que les hace temer que los siguientes trimestres no serán tan positivos. Entre los resultados importantes figuran varios de telecomunicaciones, como la empresa Verizon, que en el primer trimestre anunció que había regresado a los beneficios, con un resultado neto de 3.900 millones de dólares. Ayer, tras el cierre del mercado, presentó sus cuentas trimestrales también Sprint, la cuarta operadora de telefonía de EEUU, que cerró el primer trimestre del año con unos beneficios netos consolidados de 1.668 millones de dólares, casi doce veces más que el mismo periodo del año pasado, cuando ganó sólo 140 millones.
Estas dos empresas reflejan cómo los analistas evalúan la calidad de los resultados de manera distinta, según consideren que el aumento de beneficios responde a una evolución sana del negocio, o bien a factores no recurrentes, como la contención de los gastos o la venta de filiales. De esta manera, Verizon subía un 0,96% , al considerar los mercados que el aumento de los beneficios respondía al crecimiento de sus negocios. En el caso de Sprint, sus acciones caían al mediodía un 15,92 % tras reconocer la empresa haber recurrido a los resultados extraordinarios para engordar sus beneficios.
Otra de las empresas que presentaron resultados fueron las farmacéuticas Pfizer, que subía en bolsa un 0,54% tras anunciar un incremento del beneficio neto del 138%, y Eli Lilly -que ganaba un 2,32% pese a haber informado de un descenso del 35% de sus beneficios, que fueron de 407 millones de dólares. Tras dos horas y media de negocio, la bolsa tradicional de Nueva York movía 816 millones de acciones, y el tecnológico Nasdaq 798 millones de títulos.