La moda de los diarios en la Red
El protagonismo en Internet crece en el mundo. Las páginas personales aumentan por miles diariamente, pero aún hay pocas referencias en castellano. ¿Cómo crear una?
Por alguna razón hay elecciones tan casuales como acertadas y semánticamente tan ricas y polisémicas que parecen inevitablemente destinadas a causar sensación. Y eso es lo que ha ocurrido con el weblog y con su traducción española, bitácora. Weblog es una palabra compuesta que nos habla de un fichero (log) donde se acumulan las entradas a un servidor para consultar un sitio web determinado. Y ha pasado a designar un sitio web propiamente dicho que viene a ser el log de nuestra actividad en la Red, recogiendo entradas de nuestra mente en otras páginas o en simples acontecimientos de la vida cotidiana o profesional.
Pero aún más rico se presenta el término hispano que se ha elegido para identificar el nuevo referente de Internet. Si hace unos años quien no tenía dirección de correo o página personal no existía, quien no alimente una bitácora a estas alturas no vive con la intensidad debida la Red. Una bitácora que no es más que una página web personal, temática o no, en la que anotamos como si de un diario se tratara cuantas referencias de interés encontramos en Internet o en la vida real, ayudadas o no por fotos, audios o vídeos. Aunque también puede convertirse en un diario digital llevado por un hombre-orquesta o por un colectivo al estilo colaborativo de Barrapunto (www.barrapunto.com).
Bitácora es, para el diccionario, ese armario cercano al timón en que se pone la brújula y por ello designa ahora esa página cercana al timón nuestro en la Red, en la que se colocan los enlaces en los que hemos brujuleado cada día o los que apuntan a nuestro norte intelectual, profesional u ocioso. Pero en Puerto Rico también emplean el término para designar ora una clave, ora un enredo, un chisme. Y son muchos los chismes que se cuentan sobre las bitácoras y pocas (aún) las claves que pueden leerse sobre su cierto presente y su no menos esperanzador futuro.
Ya han surgido sitios en la Red que ofrecen alojamiento para los anecdotarios, como Independientix
Son cientos ya los lugares donde se nos narran las venturas y desventuras de las bitácoras, amén de todas y casi cada una de ellas mismas, que aumentan además en miles y miles diariamente. Pero aún no hay en castellano tantas referencias como debiera. Hay lugares como Blogalia (www.blogalia.com) y la argentina Blogdir (weblogs.com.ar) donde encontrar referencias para iniciarse con la creación de una bitácora o enlaces a análisis y comentarios sobre el papel que juega esta nueva moda en la Red (www.weblogs.com.ar/cont/metaweblog/noticias.php). Y hay direcciones de veteranos como J. J. Merelo (atalaya.blogalia.com) que muestra el camino andando y otros que contribuyen a resumirlo (www.prosperomoran.com) o quienes desde la excelencia se convierten en referentes (www.alt1040.com).
æpermil;se es el primer paso: comenzar a visitar bitácoras para poder componer una idea de cómo realizar la nuestra entre la ingente variedad de conceptos, diseños y arquitecturas que encontraremos. Será el momento en que tendremos que decidir si haremos una bitácora textual o hipertextual, una dedicada íntegramente a la fotografía (photoblog) o a ficheros de audio en lugar de textos escritos (audioblog).
Y el siguiente paso será elegir el programa o sistema que albergará y permitirá la publicación de nuestros apuntes diarios o semanales. Para ello disponemos de páginas que los comparan teniendo en cuenta una por una todas sus características (www.urldir.com/bt), aunque nos bastará con seguir los pasos de otros compañeros de aventura, optando por la sencillez y la facilidad. Si ni siquiera tenemos ordenador, Pitas (www.pitas.com) o Blogger (www.blogger.com) pueden ser buena elección, aunque teniendo en cuenta que para usar fotografías necesitaremos disponer de un servidor donde albergarlas, ya que no permiten subir ningún tipo de ficheros (salvo que optemos por la versión de pago). Necesitamos saber lenguaje html, pero también hay webs que nos traducen el texto normal al que impera en la web (www.textism.com/tools/textile). O programas que nos permiten trabajar en modo local, sin conexión a Internet, como Radio Userland (radio.userland.com), una versión reducida del servidor Web Frontier. Blogalia es otra buena elección, como también lo puede ser Livejournal (www.livejournal.com), aunque el castellano siempre es mejor compañero de viaje que el inglés. Y ya empiezan a surgir quienes ofrecen alojamiento para las bitácoras, como Independientix (blog.independientix.com).
Si es Linux nuestro sistema operativo, Movable Type (www.movabletype.org) es la elección idónea, contando con un mínimo conocimiento de bases de datos y de instalación, aunque para la publicación no sea necesario más que sentido común y un parche que traduce al castellano el entorno de edición. Y para los usuarios de Mac hay opciones eficaces como Iblog (www.apple.com/downloads/macosx/internet_utilities/iblog.html), creada por la propia Apple. Hasta Microsoft amenaza con entrar con fuerza en el negocio.
El complejo negocio de rentabilizar el esfuerzo
Sea un diario personal o un ambicioso medio de comunicación, rentabilizar el esfuerzo que supone disponer de una bitácora interesante, actualizada y que incorpore todas las novedosas opciones existentes resulta aventurado, aunque hay quien dice tener todas las claves (www.blogs4bussines.com).El caso es que encontraremos muchas bitácoras simples que no jueguen con los denomindos permalinks (enlaces permanentes de los comentarios de una bitácora) o que no empleen todavía las referencias externas o tracbacks, un ingenioso sistema para crear intercambios de audiencia que supone un paso adelante y un complemento más de los tradicionales anillos de páginas o las listas de favoritos (blogrolling, en inglés).En Estados Unidos, algunas bitácoras son un buen negocio, como lo fueron algunas páginas personales en su día, y en todo el mundo se han alzado como una fuente informativa con credibilidad en casos de guerra (warblogs) que ha relanzado la actual guerra de Irak.Para cualquier acción rentable es necesario captar audiencia y para ello hay muchos portales que referencian los comentarios más visitados y las bitácoras más populares. Iniciativas como Daypop (www.daypop.com/burst) permiten saber qué palabras son más usadas en estos sitios web y orientan sobre la temática que más preocupa a los autores. Y Weblogs (www.weblogs.com), Blogwise (www.blogwise.com) y otros muchos buscan categorizar a los mejores, mientras los Bloggies (www.fairvue.com) premian los destacados de cada año aunque sin incluir los fotoblogs que son cosa de otros (www.photojunkie.org/photobloggies). Como en el ancho mar, la navegación por Internet cada vez se hace más simple y más complicada al mismo tiempo.