Bruselas fuerza a France Télécom a devolver dinero a sus rivales
La compañía más endeudada de Europa podría ver aumentado su saldo deudor en breve. La Comisión Europea (CE) aseguró ayer que la operadora pública tendrá que devolver a sus rivales los millones de euros que recibió para financiar el servicio universal y que Bruselas considera no justificados.
La legislación francesa de telecomunicaciones establece que el servicio universal -la obligación de llevar el teléfono a núcleos de población o áreas rurales no rentables- es responsabilidad de France Télécom, pero que todos los operadores tienen que contribuir a financiarlo. Y así se ha hecho durante años.
Sin embargo, ya en diciembre de 2001 el Tribunal de Justicia dictaminó que la opacidad con la que Francia calculaba la cuantía a pagar por los operadores independientes y la forma en la que lo hacía contravenían la legislación comunitaria y llevaban las tarifas a límites superiores a los admisibles.
El objetivo principal de Bruselas en esta causa era asegurar que las telefónicas que habían contribuido a financiar el fondo del servicio universal entre 1997 y 2000 pudieran recuperar el dinero extra aportado.
Han pasado los años y no ha sido así. 'La recuperación total de los pagos excesivos no se ha producido', explicó el portavoz comunitario de competencia. 'En pocas palabras, France Télécom le sigue debiendo dinero a sus competidores'.
El portavoz comunitario rehusó dar la cifra exacta que la operadora estatal gala le sigue debiendo a sus rivales y se limitó a comentar que los millones de euros van precedidos de un doble dígito, lo que deja el espectro entre 11 y 99 millones de euros.
Si el Gobierno francés, dueño del 56% de France Télécom, no se asegura de que la operadora cumple sus obligaciones al 100%, la Comisión Europea tomará otras acciones legales que pueden llevar a una multa para el país.
Ampliación de capital
El expediente de Bruselas llega en uno de los peores momentos para France Télécom, cuyo nuevo presidente, Thierry Breton, ha tenido que apelar al mercado en la mayor ampliación de capital de la historia para cumplir los compromisos de reducción de deuda y hacer frente al pago de sus obligaciones financieras.
Aunque el periodo de suscripción de la emisión de 15.000 millones de euros en acciones terminó el pasado viernes, la operadora está ahora vendiendo los títulos que no han sido colocados entre los actuales accionistas. Esta segunda parte de la colocación termina mañana.