España y Francia serán los países más afectados por el bajón turístico
Hasta dentro de un año y medio no se recuperarán los niveles turísticos anteriores al conflicto'. Así lo asegura un informe del Centro de Dirección Turística de Esade. Los datos son concluyentes: España y Francia serán los países más afectados por la situación bélica y verán su demanda reducida en un 3,1% y un 3,4%, respectivamente.
Frente a la tesis que sostiene que el sector turístico español iba a absorber viajeros de otros destinos al percibirse el país como un lugar tranquilo, el estudio, preparado por Josep-Francesc Valls, sostiene que 'la posición del Gobierno español respecto a Irak es un factor abierto'. A diferencia de los conflictos del Golfo de 1991 o la guerra de Afganistán de 2001, cuando el número de visitantes en España creció una media del 5% anual, esta vez el turismo se verá negativamente afectado, según el estudio.
El informe, que será presentado en el XII Simposio Internacional de Turismo y Ocio patrocinado por Cinco Días que empieza mañana en Barcelona, explica que existen diferencias estructurales respecto a los años previos. Por una parte, la hostelería se encuentra en una fase de madurez y de internacionalización y los grupos tienden a ocupar la gama media-alta en busca de calidad. Mientras que las empresas hoteleras han adquirido un know-how de gestión de crisis, el sector aéreo ha impulsado tarifas a bajo precio que presionan al alza el sector, aunque 'sus consecuencias son, por el momento, poco previsibles'. A estos factores se añade que la oferta turística es más completa y competitiva que antes, por lo que Valls concluye que aunque la resistencia a la crisis es mayor, 'las fuertes inversiones pueden lastrar los resultados en momentos como los actuales'.
La realidad es que las agencias de viajes ya han reflejado descensos en las demandas. La Cúpula Asociativa de Agencias de Viajes advirtió recientemente que la contratación para el verano ha caído un 10% o 20% respecto al mismo periodo de 2002. Y el informe de Esade asegura que hasta 12 meses después del conflicto no se recuperará el número de viajes o la ocupación hotelera.
Los destinos refugio serán los alejados del conflicto y de las grandes ciudades. En concreto, lugares próximos que no requieran desplazamientos, siendo la costa preferida a las islas. Las agencias de viaje españolas ya se han percatado del cambio en el flujo turístico y, en concreto, el 6% de la población que hace viajes largos, se quedará en casa durante la Semana Santa.
Valls recomienda a la industria no bajar los precios 'llevados por el pánico, ya que no conducirá en sí mismo a la recuperación', y centrarse en la innovación, la calidad y la formación de recursos humanos.