La confianza empresarial alemana cambia de tendencia y cae en marzo
El barómetro del instituto alemán de coyuntura IFO que mide el clima empresarial en Alemania occidental cayó en marzo 0,8 puntos, hasta situarse en los 88,1 puntos, según las cifras publicadas ayer. Por contra, los analistas esperaban que este indicador reflejara este mes una leve alza de al menos 0,2 puntos.
La guerra en Irak y su potencial impacto económico han pesado, al menos parcialmente, sobre la moral de los empresarios alemanes. 'Las señales de los dos anteriores meses, que parecían indicar una recuperación del clima de confianza empresarial, no se confirman, según estos resultados', afirmó el presidente del IFO, Hans-Werner Sinn.
El barómetro IFO, que se desarrolla a partir de una encuesta entre empresarios, aumentó en enero y febrero. Pero tradicionalmente el instituto considera que es necesario al menos tres meses consecutivos de mejora para poder hablar de cambio de tendencia. Los dos componentes que permiten realizar este cálculo han retrocedido. La medición de las expectativas para los próximos seis meses cayó 1,2 puntos, hasta los 97,2 puntos, mientras que el cálculo de la situación actual retrocedió 0,4 puntos, hasta los 79,2 puntos. En el Este del país, el clima empresarial registró una caída de 1,2 puntos en marzo, hasta los 100,8 puntos. Las expectativas empresariales cayeron de 83,7 a 82,5 puntos, y el de la situación actual perdió un punto, hasta situarse en 120,3 puntos.
El IFO quiso tranquilizar al sector financiero, que considera muy fiable esta estadística, asegurando que el nivel de marzo se encuentra todavía por encima del nivel de comienzo de año, aunque reconoció que la mala noticia proviene de las desfavorables expectativas para los próximos meses. Por sectores, la moral de los presidentes, en el oeste del país, mejoró de nuevo en el sector del comercio minorista, y aumentó en la construcción. Por el contrario, se deterioró en el comercio mayorista y en la industria de transformación.
Pese a todo, el IFO no prevé que el PIB en Alemania se contraiga en el primer trimestre de este año, lo que implicaría que el país entra en una recesión técnica, ya que las estadísticas de enero y febrero fueron positivas, con una particular progresión de la producción industrial y los pedidos manufactureros. En el último trimestre de 2002, el PIB se contrajo ligeramente, haciendo temer por una recesión técnica. En estas últimas previsiones oficiales, el IFO prevé un crecimiento del 0,9% este año.