Stoiber plantea un plan de recortes sociales más duro que el del Gobierno
La liberalización de la ley de despido, la reducción del subsidio a los parados y el denominado auxilio social, así como una moratoria fiscal de cinco años para impedir nuevos aumentos de impuestos son los ejes del programa, que Stoiber definió como 'valiente' y 'con perspectivas'.
Ante el proyecto de reformas 'insuficiente' e 'insatisfactorio' presentado por Schröder en el Parlamento alemán, la Unión Cristianosocial (CSU) de Baviera que preside Stoiber defiende una alternativa más radical, destinada a abaratar el empleo en Alemania.
El primer ministro bávaro propone, por ejemplo, flexibilizar el despido para empresas hasta de 20 empleados, en lugar de cinco, como hasta ahora; reducir el periodo máximo por el que se puede cobrar la prestación por desempleo a 12 meses, frente a los 32 meses actuales, y reducir el auxilio social a un 75% de su nivel actual. La mayoría de estas medidas coinciden, en cuanto a orientación, con las anunciadas por Schröder, sólo que acentuando los recortes.
Anteriormente a su presentación, el plan de Stoiber había cosechado duras críticas internas, tanto por parte del partido matriz, la Unión Cristianodemócrata (CDU), como de su propia CSU.
El secretario general de la CDU, Laurenz Meyer, rechazó de plano semejante flexibilización de la protección contra el despido, con el argumento de que con ello aumentaría el número de desempleados.
El vicepresidente de la CSU y ex ministro de Sanidad con Helmut Kohl, Horst Seehofer, amenazó incluso con presentar su dimisión, en desacuerdo con el plan de Stoiber. El pasado fin de semana, los dos dirigentes bávaros limaron diferencias, tras corregir Stoiber algunos de sus puntos.
El primer ministro bávaro invitó ayer a la CDU a elaborar un plan común, a perfilar en una reunión conjunta de las ejecutivas del partido matriz y su ala bávara que se celebrará del 4 al 5 de mayo.
'No tenemos tiempo que perder', dijo Stoiber, repitiendo así una frase que también pronunció el canciller Schröder ante el Parlamento para defender sus reformas estructurales.
Por otra parte, ayer se hizo público que los precios de importación en Alemania aumentaron un 0,6% en febrero respecto a enero y con relación a febrero de 2002, debido al encarecimiento del precio del petróleo, según informó la Oficina Federal de Estadísticas.
En enero y diciembre los precios habían aumentado un 0,5% en tasa interanual, precisó la oficina. Si no se tiene en cuenta el petróleo, los precios de importación retrocedieron en febrero un 2,3% respecto a febrero de 2002, tras una caída del 2,4% en enero. Los precios de los productos derivados del petróleo subieron un 46,6% en febrero en tasa interanual y un 11,4% respecto a enero, mientras que los del crudo lo hicieron un 34,3% en tasa interanual.
Los precios de exportación aumentaron un 0,3% en febrero en relación con el mes de enero y un 0,9% en tasa interanual, después de hacerlo un 0,6% en enero y diciembre.