Inditex gana un 29% más pese a la ralentización del último trimestre
Los resultados de Inditex correspondientes a 2002, con un crecimiento del 29% en su beneficio neto -que se sitúa en 438,1 millones de euros-, han dado argumentos suficientes a quienes califican a su presidente, Amancio Ortega, como el ejecutivo español de mayor prestigio. La discreción del principal accionista del grupo textil gallego contrasta con lo que se ha dado en llamar 'milagro Inditex' y que no hace sino constatar el cumplimiento de las promesas que la empresa hizo hace casi dos años cuando salió a Bolsa: crecer por encima del 20% anual durante los siguientes cinco años.
Esta vez, el crecimiento de la cifra de negocio se ha situado en el 22%, al alcanzar 3.974 millones de euros, lo que le deja en la media de las estimaciones realizadas por los analistas. Y si no hubiera sido por la penalización que ha sufrido por la adversa evolución de los tipos de cambio, el incremento hubiera sido mayor, del 28% a tipos de cambio constantes.
El Ebitda o resultado bruto de explotación se ha situado en 868,1 millones de euros, lo que significa un incremento del 23%, mientras que el resultado de operaciones se ha elevado un 27%, hasta 659,3 millones.
Pero pese a toda esa escalada en ventas y beneficios, Inditex ha retrocedido en los incrementos que había presentado al cierre del tercer trimestre. En los nueve primeros meses del año fiscal, el beneficio había aumentado un 31,3% sobre el mismo periodo de 2001, y las ventas lo habían hecho un 25,8%. Esto significa que en el último trimestre del año las ventas sólo han aumentado un 15%, y el resultado neto un 24,5%.
Navidad y rebajas
La explicación está en la campaña de Navidad y, especialmente, en diciembre. En línea con toda la distribución española, durante el último mes de 2002 sufrió un importante estancamiento de las ventas que ha afectado a las cuentas de resultados de las empresas. Los consumidores compraron menos regalos y esperaron hasta el último momento para realizar sus adquisiciones. Esto hizo que gran parte del negocio se realizara en la primera semana de enero y, en todo caso, que disminuyera el volumen total de compra.
Las rebajas, en cambio, han ido 'como se esperaba', según fuentes de la empresa. Una gran parte del negocio de la compañía se concentra en el último trimestre del año por lo que tanto la campaña de Navidad como las rebajas son fundamentales. En 2002, el cuarto trimestre ha registrado un aumento del 15% en facturación, frente al 25% que logró el año anterior.
Para el conjunto del año, Ahorro Corporación había estimado un incremento de las ventas del 21,9%; Banesto, del 22,14%; el BBVA, del 24,5%, y UBS (el más optimista), del 24,9%. El crecimiento del beneficio neto también se ha acercado a las estimaciones, aunque el analista de UBS lo situaba por encima del 35% y el de Banesto había fijado un alza superior al 31%.
Otro de los aspectos que han actuado en contra de la evolución del grupo ha sido la situación económica de algunos países de América Latina y especialmente de Venezuela, donde la multinacional española se ha visto obligada a mantener cerradas las tiendas durante un periodo de dos meses por la huelga contra el presidente Chávez.
274 nuevas tiendas
Para mantener las promesas de crecimiento, el grupo gallego continúa con su fuerte programa de inversiones, que le permite aumentar el número de establecimientos por encima de los 250 anuales. De hecho, durante el pasado ejercicio, Inditex incorporó un total de 274 nuevas tiendas, hasta situarse en 1.558 en 44 países. Sin contar estas aperturas, es decir, a tiendas comparables, el aumento de las ventas es del 11%.
Una gran parte de este plan de expansión se concentra en Europa, donde está la más firme apuesta de Inditex. El 85% de las nuevas aperturas se han realizado en el Viejo Continente y este incremento se refleja en el peso creciente que tienen países como Francia, Bélgica, Reino Unido, Alemania e Italia.
Las grandes tiendas en edificios emblemáticos de las principales ciudades europeas se han convertido ya casi en un reto constantemente superado por otro nuevo establecimiento con mayores escaparates y más superficie de venta que el anterior. Así ocurrió con la última apertura de Londres, un local situado junto a las grandes firmas de lujo como Gucci o Versace.
A lo largo del pasado año se estrenaron también nuevos mercados como el suizo, el finlandés, los de República Dominicana, El Salvador y Singapur. Precisamente, la tienda que se abrió en este último Estado agotó toda su mercancía a los tres días de abrir sus puertas al público.
Por marcas, la estrella sigue siendo Zara, con 65 aperturas y un total de 531 establecimientos. La segunda por crecimiento ha sido Pull & Bear (47), que ya suma 296 tiendas, mientras que la cadena de ropa de hombre, Massimo Dutti (250 locales) registró sólo 27 incorporaciones. Las enseñas de ropa destinadas a un público muy joven, Bershka y Stradivarius, también demuestran dinamismo con 46 y 33 nuevas tiendas.
Mejora de márgenes y optimización de los costes
Gran parte del éxito de Inditex radica en el perfeccionamiento de su sistema logístico y en la integración de todo el proceso, desde el diseño hasta la comercialización en la tienda, pasando por la fabricación y distribución. Esto les ha permitido adaptarse a los gustos del consumidor, ajustar la venta de gabardinas y abrigos a medida que se comportaba la temporada y, sobre todo, mejorar los márgenes operativos en cada uno de los pasos del proceso.En todo caso, el aumento porcentual del beneficio (el 29%) sigue siendo superior al de las ventas (22%). Esto se debe, según la compañía, a la mejora de su margen operativo y a una constante optimización de los costes, de la gestión y del inventario.También contribuye la absorción de los costes de las numerosas aperturas que tuvieron lugar entre 1998 y 1999 (justo antes de la salida a Bolsa) cuando el grupo conquistó Europa con sus grandes tiendas de enormes ventanales-escaparates que hacían las veces de reclamos publicitarios.æpermil;ste es, precisamente, otro de los aspectos en los que Inditex continúa incidiendo y que le permite sustituir las inversiones en publicidad por las inversiones en inmuebles.El grupo textil gallego se ha convertido en un cliente habitual de los grandes brokers inmobiliarios internacionales que tienen el encargo de buscar las mejores localizaciones en cada ciudad, especialmente para su cadena Zara. Este reto ha vuelto a cumplirse durante el ejercicio 2002.En el terreno inmobiliario, el grupo también ha continuado las obras de construcción del nuevo centro logístico de su enseña principal en Zaragoza, cuya puesta en marcha está prevista para el próximo verano.Esta plataforma, en la que se van a invertir un total de 100 millones de euros, garantizará el mantenimiento de la capacidad logística de Zara de cara al futuro.