Volkswagen augura un duro ejercicio con una caída del beneficio operativo
El grupo Volkswagen advirtió ayer que sus ganancias operativas para este año serán inferiores a las registradas en el último ejercicio si persiste la demanda débil y los tipos de cambio desfavorables.
Dados los tipos de cambio actuales, y en el caso de que la situación del mercado en Europa oriental y Estados Unidos no mejore, este año no podremos igualar las ganancias operativas de 2002, de 4.761 millones de euros', aseguró ayer el presidente ejecutivo de Volkswagen, Bernd Pischetsrieder, en una rueda de prensa.
Pischetsrieder precisó que el resultado del primer trimestre de 2003 estaría considerablemente por debajo del nivel del año anterior, pero dijo que el recorte sustancial de costes y los nuevos modelos 'revertirían el panorama' en 2004.
Con todo, no se aventuró a dar cifras concretas, tras indicar que los beneficios de explotación en 2002 fueron de 4.761 millones de euros, un 12% menos que en 2001.
Los beneficios antes de impuestos también descendieron un 9,6%, hasta 3.986 millones, mientras que el número de vehículos vendidos bajó un 2,2 %, en total, 4,99 millones de unidades.
Los riesgos para las ventas del primer fabricante europeo de automóviles son difíciles de calcular debido a la incierta seguridad política en Irak, pero también los imponderables por el tipo de cambio de moneda, que generaron 500 millones de euros de pérdidas en 2002, pese al seguro de riesgo.
Pischetsrieder también mencionó el peligro de boicot de los consumidores estadounidenses en 2003, por la posición del Gobierno alemán ante una guerra en Irak.
Ante la recesión que puede ensombrecer las economías de Europa y EE UU, Volkswagen, incluida su filial Audi, ha apostado fuerte por los mercados asiáticos, especialmente China, donde espera vender este año unos 600.000 vehículos.