S&P tacha de insuficientes las medidas adoptadas por las entidades alemanas
La agencia de calificación de riesgos Standard & Poor's (S&P) mostró ayer su desconfianza hacia las medidas emprendidas por la banca alemana para salir de la crisis.
'Las medidas adoptadas por las entidades serán insuficientes si vuelven a caer los ingresos, algo que es cada vez más probable', aseguraron ayer Bernd Ackermann, analista de la oficina de Francfort, y Jesús Martínez, director del área de instituciones financieras para España y Portugal. En cualquier caso, el presidente del Dresdner, Bernd Fahrholz, aseguró ayer que el banco obtendrá beneficios este año.
Tres de los principales cuatro bancos del país tienen una perspectiva negativa de la agencia de riesgos (excepto Deutsche), lo cual pone ya de manifiesto la escasa confianza que inspira a S&P la situación de estas entidades. Trece de las 15 mayores entidades del país tienen perspectivas negativas, dos más que en enero del año pasado.
Según los analistas, las entidades alemanas están 'más centradas en su propia reestructuración que en vender más productos'. Los cuatro grandes bancos -Deutsche, Hypovereinsbank, Dresdner y Commerzbank- se han de enfrentar además al 'nivel extraordinariamente alto' de fragmentación que sufre el mercado teutón. En el país operan un total de 2.600 entidades financieras. Esta 'fiera' competencia hace que 'los niveles de rentabilidad sean bajos, bajo los estándares internacionales'.
La situación actual es también consecuencia de erróneas planificaciones en años anteriores, según Ackermann. 'Es tiempo de cosechar los frutos de una excesiva expansión en banca de inversión'.
Standard & Poor's destaca la atonía de la demanda de productos financieros, debido, en gran parte, a las pésimas condiciones económicas en el país. Además, según Ackermann, la banca se ha de enfrentar con un más que previsible incremento de las insolvencias empresariales, que en 2002 sobrepasaron los 40.000 millones de euros.
Esta previsión hace improbable que las provisiones puedan descender durante este año. Así, las dos principales áreas de preocupación para S&P serán el área minorista y la banca de empresas.
Por si el panorama no fuera suficiente, la banca alemana se ha visto afectada, como todo el sector en Europa, por los bajos tipos de interés, que han afectado negativamente a su financiación, al haberse estrechado el diferencial de la deuda a corto y a largo plazo.