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Operación

Los socios españoles de Aguas de Valencia ofrecerán a Bouygues comprar su parte

Los accionistas españoles del grupo Aguas de Valencia ofrecerán al principal socio de la compañía, el grupo francés Bouygues, comprar su 33%, como respuesta a la petición pública que realizó esta compañía el pasado 18 de febrero para que se rompiera el pacto de accionistas. Este pacto otorga a los accionistas un derecho de tanteo sobre los títulos que alguno quiera vender e impide que ningún socio supere el 33% del capital.

Los firmantes son el Banco de Valencia, que tiene el 19,11%, Facsa (11,44%), el presidente Vicente Boluda (11,44%) y Lubasa (9,8%) y Saur, filial de Bouygues. Saur pidió la ruptura del pacto 'para poder obrar con mayor libertad en defensa de los intereses de Aguas de Valencia y de la propia Saur'. Fuentes cercanas al grupo galo han indicado que su intención no es vender, sino hacerse con la mayoría de la compañía, y que existe un principio de acuerdo para comprar la participación de Vicente Boluda.

El enfrentamiento entre los accionistas, que firmaron este pacto en 2000, tras varios años de disputas, se reavivó a finales del año pasado, cuando el consejo suspendió y después despidió a dos altos directivos, a los que acusó de inflar las cuentas. El juicio por estos despidos se celebrará en las próximas semanas. La empresa encargó una auditoría sobre la gestión de estos directivos y Bouygues exigió que se extendiera a todos los altos cargos.

El distanciamiento entre los accionistas ha evidenciado una vez más esta semana, cuando Aguas de Valencia ha enviado su avance de resultados de 2002 sin que los haya visto el consejo de administración y sin que Bouygues tuviese conocimiento de las cuentas. Fuentes de la filial del grupo francés declinaron ayer comentar esta circunstancia y manifestaron que no saben cuándo se convocará una reunión del consejo. Los resultados reflejan una disminución de los beneficios ordinarios del 44,7% -de la que se culpa a los directivos despedidos-, aunque los extraordinarios hacen que el beneficio neto consolidado se multiplique por cinco, hasta 29,31 millones de euros.

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