La Bolsa rebota un 1,83% tras rebajar Estados Unidos la alerta terrorista
El Ibex subió un 1,83% con una cifra de actividad algo más elevada que en jornadas anteriores, 1.584 millones, de los que 309 millones se negociaron en bloques. El rebote de Wall Street en las horas de coincidencia operativa permitió a la Bolsa española salir de la indefinición y recuperar posiciones.
En otras plazas europea, la evolución fue similar. El comportamiento errático a primera hora dio paso a las ganancias gracias al tirón del mercado estadounidense.
Las subidas se produjeron entre noticias relacionadas con el conflicto en Irak. Por un lado, una agencia egipcia indicó que Bagdad podría destruir sus misiles Al-Samoud tal y como pidió la ONU. Además, comenzaron a circular informaciones sobre la rebaja en Estados Unidos del nivel de amenaza terrorista desde naranja hasta amarillo. Sin embargo, y pese a la aparente menor tensión, el petróleo alcanzaba en Nueva York el máximo desde la Guerra del Golfo hace 12 años.
En la Bolsa española, fueron los grandes bancos los principales responsables de la mejora. El SCH sumó el 4,93% y el BBVA, el 2,94%. Telefónica también contribuyó, con un alza del 1,05% después de presentar resultados.
Los expertos, no obstante, aconsejan cautela con los episodios alcistas. La mayor parte de los analistas comienza a considerar ya que existe el riesgo de que la incertidumbre se traduzca en menor crecimiento. Los datos de ventas ofrecidos el miércoles por Hewlett-Packard son elocuentes en este sentido y comienza a cundir la idea de que ésta puede ser una norma para los próximos meses.
Otro de los asuntos que centran la atención de los expertos, además de las diferentes posiciones alrededor de la guerra contra Irak, del alza del petróleo y el consiguiente impacto en la economía mundial y de la avalancha de resultados empresariales, son los indicadores de actividad en Europa.
Tras la divulgación de los datos de crecimiento del cuarto trimestre en la zona euro, los expertos señalan que el crecimiento para el agregado será prácticamente nulo en los últimos meses del año pasado y que ello añadirá más presión para que el BCE recorte sus tipos oficiales, salvo que la inflación repunte a corto plazo. Esto es, precisamente, lo que han comenzado a mostrar los datos de inflación de algunos länder alemanes.
Debilidad económica
'Las primeras estimaciones de PIB en los principales países de la zona euro (a falta de Italia) han confirmado el brusco frenazo de la actividad en la región', dicen los analistas de Société Générale, para quienes la debilidad de los datos 'no ha sido una sorpresa, dado el deterioro de la mayoría de los indicadores desde el pasado verano'. El banco francés, por tanto, revisará a la baja las previsiones de crecimiento para la zona euro. Estos expertos no apuestan por una mejoría a corto plazo, 'debido a la prolongación de la incertidumbre sobre la crisis de Irak'.
'Lo que sucede en la renta variable es algo conocido en los tres últimos años. Desde mi punto de vista se trata más de una aversión al riesgo que de un problema de precios', dice José Luis Martínez, economista jefe en España de Citigroup.
'Es difícil luchar contra este tipo de argumentos, especialmente cuando también los fundamentales pueden verse comprometidos por la situación actual de incertidumbre', añade Martínez.
Caídas anuales en Europa entre el 2,2% y el 13%
Las pérdidas han inundado los mercados europeos en el año. Un cúmulo de factores han acabado con el buen arranque de ejercicio: el nerviosismo por la crisis iraquí, las pobres perspectivas económicas, los escándalos contables y los resultados empresariales que no terminan de despegar.Los mercados, así, acumulan pérdidas en el año, desde el 13,11% de Francfort y el 11,36% de París al 9,4% de Londres. Las mejores plazas europeas son la italiana, que cae el 2,18%, y la española, un 2,47%, en lo que llevamos de ejercicio. Todos los sectores retroceden en el año. Sin embargo, aseguradoras y químicas sufren las pérdidas más abultadas. Precisamente, estos dos grupos tienen muy poca presencia en el mercado español, de ahí su mejor comportamiento relativo. El índice Stoxx de seguros pierde desde que comenzó el año un 17,8%. La débil posición financiera en la que han quedado estas compañías después de tres años continuados de caídas en los mercados de valores ha hecho temer a los inversores que alguna de ellas pueda no superar la crisis de liquidez. Royal & Sun Alliance, con un descenso del 45,76%, y Munich Re, que cae el 30%, están entre las más castigadas. Las químicas tampoco han salido bien paradas. La inquietud por las demandas que pesan sobre Bayer por el caso Lipobay y los costes que podrían acarrear ha provocado una caída del 39% en el año. Rhodia cede el 36,12% y Akzo Nobel, el 35,3%. Telecos y automovilísticas aguantan mejor el tipo, con caídas del 5,3% y 5,8%.