La segunda revisión del PIB de EEUU para 2002 duplica las previsiones, hasta el 1,4%
La economía de EEUU creció un ritmo anual del 1,4% durante el cuarto trimestre de 2002, según las cifras revisadas que divulgó hoy por el Departamento de Comercio, lo que supone el doble del 0,7% preliminar.
El aumento del PIB es también mayor que el 1% previsto por la mayoría de los analistas, pero no deja de suponer un fuerte descenso respecto al 4% registrado en el tercer trimestre del año pasado.
Este incremento del PIB se debió al aumento del gasto de los consumidores y de la inversión empresarial, según los datos revisados del Departamento de Comercio.
El gasto de los consumidores, que representa dos tercios del PIB, aumentó un 1,5% durante el último trimestre del año, frente al 1% que apuntaban las cifras preliminares. Además, la inversión empresarial dio un salto del 2,5%, por encima del 1,5% de los datos iniciales, debido sobre todo a un incremento de los gastos para reponer inventarios.
Pero, por encima de ese aumento, esta cifra de inversión empresarial es la mejor desde el tercer trimestre de 2000, cuando la economía de EEUU agudizó su desaceleración, antes de entrar en una breve recesión en 2001. La mayoría de los analistas y economistas cree que el incremento de 2003 será mayor, y calculan que la economía estadounidense crecerá durante este primer trimestre del año a un ritmo del 2,6% anual.
Sin embargo, la incertidumbre de una guerra contra Irak, que está conllevando un fuerte aumento del precio del petróleo, puede frenar esta recuperación, según temen los expertos.
Hasta ahora, el mayor freno a la recuperación es la reticencia de las empresas a emprender nuevas inversiones en un panorama que no ven muy claro ante la amenaza de una guerra en el golfo Pérsico.
La mejora económica apuntada hoy, aunque no es espectacular, puede tener consecuencias políticas, ya que el Congreso podría considerar que no es necesario el programa de estímulo económico propuesto por el presidente estadounidense, George W. Bush, que se basa sobre todo en nuevas rebajas de impuestos para incentivar el consumo y la inversión.