La Bolsa española es la única de Europa que aguanta el tipo en el año
La Bolsa española no es ajena a las numerosas incertidumbres que planean sobre el mercado. La elevada volatilidad y el escaso volumen de negocio que han caracterizado al mercado desde el comienzo del año son claros síntomas. La relativa calma en Latinoamérica y una menor exposición al sector financiero han ayudado al Ibex a convertirse en la mejor plaza europea hasta la fecha.
El Ibex se mantiene en terreno positivo a duras penas pero la ganancia del 0,1% contrasta con la caída del 7,6% del Cac, el retroceso del 5,41% del Footsie o las pérdidas del 8,4% del Dax. Milán, algo mejor, cae el 1,5%.
La disparidad entre el comportamiento de la Bolsa alemana y la española se explica en parte por las diferencias sectoriales de ambos mercados. El sector financiero, uno de los grupos más castigados este ejercicio, tiene una elevada ponderación en el índice alemán. Las dudas sobre la solvencia de las aseguradoras le han costado fuertes castigos. En el Ibex la representación de bancos es alta, pero la de aseguradoras es nula.
Las menores incertidumbres en Latinoamérica también han ayudado al mercado español. Los primeros pasos del Gobierno brasileño capitaneado por Lula han recibido el visto bueno de los inversores. Las incógnitas, con todo, persisten dado el proceso inflacionista en que se encuentra inmerso el país.
Posteriormente, el acuerdo de Argentina con el Fondo Monetario Internacional ha suavizado las tensiones que pesaban sobre las grandes empresas españolas con intereses en la región. La situación, no obstante, aún requiere cautela hasta conocer los resultados de las elecciones presidenciales del próximo 27 de abril.
Entretanto, las empresas españolas más beneficiadas continúan siendo aquellas de pequeña y mediana capitalización, una tendencia que se viene repitiendo en los últimos tres años. En el año destacan los avances de Amper (+15,6%), Telepizza (+14,7%), Amadeus (+12,7%) o Faes (+12,9%). Los expertos reconocen que el verdadero rebote vendrá de la mano de los valores grandes.