El blindaje estatutario limita los derechos políticos
Los nuevos estatutos de Dragados, aprobados por el SCH en vísperas de la entrada de ACS en el capital de la constructora, limitan los derechos de voto de cualquier accionista al 25%. Por eso, si la opa tiene éxito, ACS sólo tendrá asegurado el ejercicio de derechos políticos relativos a ese porcentaje, aunque controlará de forma efectiva el 33,5%.
Los estatutos también establecen un segundo blindaje, ya que sólo pueden modificarse con el apoyo del 75% del capital social.
Debido a estas restricciones, en el folleto explicativo de la opa, que el viernes aprobó la Comisión Nacional del Mercado de Valores, ACS afirma que esta operación 'no implicará una toma de control' y 'no le otorgará la mayoría de votos en Dragados, ni individualmente ni en concierto con terceros accionistas'.
Consejo
No obstante, dada 'la actual estructura de distribución del capital social de Dragados', ACS reconoce contar con 'influencia significativa' en la toma de decisiones a través del ejercicio político en las juntas de accionistas y mediante la participación de sus consejeros dominicales (cuatro sobre un total de nueve) en el consejo de administración de la constructora.
Asimismo, afirma que la opa de ACS sobre un 10% adicional de Dragados, además de evitar el riesgo de una oferta similar por parte de un tercer grupo, persigue 'reforzar significativamente y con carácter de permanencia a largo plazo su posición como accionista de referencia'. Mientras tanto, la constructora que preside Pérez, expresa su compromiso de no promover nuevas modificaciones en el capital social de Dragados 'ni ninguna otra operación societaria que pudiera afectar directa o indirectamente al grupo'.