Bruselas insinúa que suavizará el Pacto de Estabilidad si estalla la guerra
La Comisión Europea no excluye promover una interpretación más flexible del Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE si así se revela necesario por las consecuencias económicas de un hipotético conflicto en Irak.
'Si hubiese una guerra, estudiaríamos las medidas que fuesen necesarias. El tratado prevé que, en situaciones excepcionales, se puedan tomar medidas apropiadas para esas circunstancias', señaló ayer un portavoz del Ejecutivo comunitario al ser preguntado sobre si la Comisión considera suavizar el pacto en caso de guerra.
No obstante, aclaró que no hay nada decidido al respecto. 'Hasta que esas circunstancias no se den no es posible especular sobre las medidas a tomar', avisó.
En la misma línea se manifestó el vicepresidente del Bundesbank alemán Juergen Stark. 'Sólo bajo el peligro de una gran recesión se deberían aplicar los procedimientos extraordinarios con que cuenta el pacto; creo que una guerra corta no tendría unos efectos tan dramáticos como para provocar una profunda recesión', admitió a Reuters.
Y es que los nervios sobre la repercusión del conflicto en las finanzas europeas se dejaron notar ayer. Los Gobiernos de Alemania y Francia se vieron obligados a desmentir algunas informaciones publicadas el día anterior en las que se afirmaba que Berlín y París pedirían la revisión del Pacto de Estabilidad en el momento en que se entrara en guerra, por los efectos del conflicto sobre sus déficit presupuestarios, en situación precaria.
El Pacto de Estabilidad y Crecimiento compromete a los Gobiernos de la UE a alcanzar progresivamente el equilibrio de sus cuentas públicas y a no superar nunca un déficit fiscal del 3% del PIB.
Alemania, Francia, Italia y Portugal son los países con mayores dificultades para cumplir sus objetivos presupuestarios. Tanto es así que en octubre pasado la Comisión Europea amplió el plazo dos años (hasta 2006) para que saneen sus finanzas, a condición de que reduzcan sus déficit estructurales, a razón de un 0,5% del PIB anual. Se trata de la aplicación 'inteligente' del Pacto de Estabilidad, la nueva doctrina del Ejecutivo comunitario por la que se da importancia al momento económico de cada país.
Precisamente ayer, el comisario europeo de Asuntos Monetarios, Pedro Solbes, matizó esta interpretación 'inteligente' que se debe hacer del pacto. En un artículo publicado en el boletín especial sobre coyuntura del Instituto Flores de Lemus (Universidad Carlos III de Madrid), Solbes advirtió del alto endeudamiento de algunos países como Italia y Grecia, que supera el 100% del PIB, muy lejos del ratio del 60% propuesto por la Comisión. Solbes sugiere que se sancione a todos los países que no contribuyan a reducir su nivel de deuda, al igual que ocurre con los que sobrepasan su déficit presupuestario el 3% del PIB.
También propone que se sancionen lo que denomina 'relajamientos procíclicos' de los Gobiernos, de forma que los estabilizadores automáticos operen 'de forma simétrica a lo largo de todo el ciclo, informa Bernardo Díaz. 'Esto implica lograr superávit nominales cuando las condiciones económicas sean favorables (altos crecimientos económicos)', avisa.
Si un país con alto crecimiento económico, en plena fase expansiva de su ciclo, se niega a alcanzar y mantenerse en superávit, 'ello debería dar lugar a una respuesta adecuada y oportuna de la UE, empleando los instrumentos contemplados en el tratado'. En cualquier caso, Solbes recalca que el Pacto de Estabilidad sigue estando vigente, aun en condiciones económicas no óptimas como las actuales.
Círculo de Empresarios
El Círculo de Empresarios presentó ayer un libro en el que ha reunido a 19 expertos para analizar la eficacia del Pacto de Estabilidad. Tras definir el citado pacto como un 'instrumento demasiado tosco', según palabras del presidente del Círculo, Manuel Azpilicueta, los autores del libro proponen algunas reformas.
Una de las principales coincide con la citada opinión del comisario Sol bes en cuanto a la necesidad de diseñar un pacto 'más simétrico'. Esto consistiría en que, además de fijar un límite de déficit anual de sus cuentas públicas que los Estados no pueden superar, también se establezcan objetivos de superávit para las fases altas del ciclo o de equilibrio al final del mismo.
Asimismo, algunos de estos expertos opinan que el Pacto de Estabilidad debería incluir objetivos del nivel de deuda pública. Es más, uno de estos autores, Guillermo de la Dehesa, considera incluso que dicho nivel de deuda debería ser el 'chivato' por el que se midiera la estabilidad de la economía de los Estados, en lugar del déficit.
Otras ideas lanzadas por el Círculo de Empresarios son la de modificar el régimen de sanciones para los países que incumplan el pacto, de forma que no puedan nombrar comisarios o representantes en el Banco Central Europeo, informa Raquel Pascual.