CCOO denuncia a Nissan por congelar los salarios en Barcelona
El sindicato Comisiones Obreras ha presentado hoy ante la Inspección de Trabajo una denuncia contra la dirección de Nissan Motor Ibérica por congelar los salarios en sus plantas de Barcelona y Montcada, tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que anuló la doble escala salarial pactada en la compañía.
CCOO considera que la decisión de Nissan es un "castigo" por la citada resolución judicial, que consideró ilegal y contraria a la Constitución la existencia de un doble baremo salarial para los trabajadores antiguos y los nuevos empleados.
La sentencia del TSJC se produce después de que CCOO impugnase el acuerdo alcanzado por la empresa con UGT, sindicato mayoritario en la compañía, y el sindicato SIGEN (Sindicato Independiente del Grupo de Empresas Nissan). La doble escala preveía unos emolumentos inferiores en un 17 por ciento para los nuevos trabajadores.
La Federación Minerometalúrgica de CC.OO. de Catalunya hizo público un comunicado en el que afirma que "no podemos entender" que UGT coincida con los planteamientos de la empresa, "haciéndose eco de sus amenazas y aceptando planteamientos que no sólo rebajan las condiciones de los trabajadores, sino que infringen la ley básica de forma flagrante". Los argumentos de Nissan, que han sido también esgrimidos por el secretario general de la sección sindical de UGT, Jordi Carmona, son que la anulación de la doble escala salarial pone en peligro la fabricación en Barcelona del sustituto del del todoterreno "Terrano II".
La Generalitat, preocupada por la producción del §Terrano II§
La Generalitat ha mostrado hoy su preocupación por la posibilidad de que la planta de Nissan Motor Ibérica en Barcelona haya perdido posibilidades para adjudicarse la producción del modelo que sustituirá al actual todoterreno "Terrano II" tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que ha anulado la doble escala salarial pactada en empresa.
El director general de Industria, Antoni Gurguí, ha reconocido hoy que el citado fallo judicial "complica" la situación, que se encontraba "muy bien encarrilada". La producción del nuevo modelo debe suponer una inversión "importante", que aún no ha sido cuantificada. Gurguí ha subrayado que la decisión sobre el nuevo modelo, que debe producirse a partir de 2005 ó 2006, debe tomarse "estos días".