Los economistas ven peligroso el exceso de regulación
El decano del Colegio de Economistas de Madrid, Manuel Lagares, presentó ayer el último número de la revista Economistas, dedicada íntegramente al análisis del gobierno de la empresa. Lagares destacó la importancia de la transparencia de las empresas. 'Los mercados funcionan cuando son transparentes y cuando no hay excesiva concentración de poder', señaló.
Por su parte, el catedrático de Economía de la Empresa, Álvaro Cuervo, coordinador del estudio, aseguró que el gobierno de la empresa debe tratar de resolver los conflictos de intereses más significativos en las empresas, como los que se dan entre directivos y accionistas, entre las actividades de consultoría y auditoría de las firmas auditoras, del análisis y gestión de patrimonios de la banca de inversión. Cuervo se mostró poco partidario de la regulación excesiva, salvo en el tema de 'las conductas desleales y dolosas de los consejeros y el tema de la transparencia, y a partir de ahí, dejar que funcionen los mercados'.
Sin embargo, la regulación no es mala, en opinión del director de operaciones del grupo Prisa, Ignacio Santillana. 'No me parece que regular sea un elemento del que haya que alejarse. Es necesario regular sin producir perturbaciones, pero poniendo remedio a los problemas'. Santillana explicó, además, que el reto actual es 'seguir trabajando sobre lo que ha dicho el Informe Aldama, que es continuación del Código Olivencia'. Para Juan Iranzo, vicedecano del Colegio de Economistas de Madrid y uno de los integrantes de la comisión encargada de redactar el Informe Aldama, el peligro está en sobrerreaccionar ante determinados acontecimientos. Además, aseguró que 'un exceso de regulación no va a impedir algunas situaciones ilegales y, sin embargo, pueden amenazar el funcionamiento de las empresas'.
Iranzo hizo un repaso por las principales recomendaciones del Informe Aldama y abogó por reforzar normativamente la transparencia de las empresas y los deberes de lealtad de los administradores y dejar a la autorregulación de las empresas el resto de los aspectos.
El presidente de Indra, Javier Monzón, coincidió con el resto de los participantes en la presentación de la revista en la importancia de la transparencia. 'No podemos aspirar a conseguir la confianza de los inversores si no hay transparencia'. Sin embargo, Javier Monzón se mostró contrario a la idea de la existencia de un único código de buen gobierno compendio del Código Olivencia y el Informe Aldama. 'Si hacemos un solo código, no habrá creatividad', señaló
Control en la información por Internet
La difusión de la información financiera por la Red debería legislarse o, al menos, controlarse oficialmente. Así lo señaló ayer Juan Luis Gandía, ponente del Código de buenas prácticas para la divulgación de información financiera en Internet.El texto, elaborado por la Asociación Española de Contabilidad y Administración de Empresas (AECA), se presentó ayer, con la colaboración de PricewaterhouseCoopers. Entre otros aspectos, el código considera que las empresas deben facilitar por Internet, como mínimo, la información que deben enviar a la CNMV. Y, en el caso de las no cotizadas, la información que se deposita en el Registro Mercantil. El texto propone que las compañías conserven en su página web la información financiera durante cinco años y que los auditores, como complemento a su labor, certifiquen los datos difundidos. No obstante, sobre el tema de la certificación, Enrique Bonsón, también ponente del código, señaló que no es previsible que se otorgue la exclusividad a ninguna entidad. Por otro lado, señaló que ahora las empresas difunden información por la Red, pero lo hacen de forma sesgada.