La riqueza de las familias cayó 93.235 millones hasta septiembre de 2002
La riqueza financieras de las familias descendió en los nueve primeros meses del año pasado en 93.235 millones de euros y se situó al término de septiembre en 1,07 billones de euros. Según los últimos datos del Banco de España, este descenso ha provocado que el ahorro financiero de las familias españolas pasara a representar en septiembre el 158,2% del Producto Interior Bruto (PIB), 21,6 puntos menos que nueve meses antes.
Esta cifra está, además, muy lejana del máximo del 189,7% que llegaron a suponer los activos financieros frente al PIB a finales de 1999, cuando las bolsas estaban en sus niveles más altos y todavía persistía la euforia sobre las compañías tecnológicas y de Internet. Las cifras del Banco de España muestran que en los nueve primeros meses del 2002 se produjo una retirada de las familias de los activos con más riesgo, como las acciones y los fondos de inversión, hacia otros que ofrecen más seguridad, como los depósitos y los seguros de vida-ahorro.
La caída bursátil, principal causa
La caída bursátil de los últimos ejercicios ha sido una de las principales causas de este cambio en las preferencias de ahorro de las familias españolas, ya que muchas han optado por vender sus participaciones en acciones, tanto las cotizadas como las que no, y las han dirigido a depósitos o a seguros de ahorro y planes de pensiones, menos expuestos a la volatilidad de los mercados.
Por ello, la riqueza de las familias e instituciones sin ánimo de lucro en acciones descendió un 35,36% en los nueve primeros meses del año anterior, y se situó en 211.898 millones de euros, 115.908 millones menos. Los fondos de inversión también tuvieron un efecto negativo en la evolución del ahorro de las familias españolas, que en este apartado disminuyó en 10.423 millones, hasta 130.237 millones. Por el contrario, la cuantía acumulada en depósitos y efectivo aumentó el 5,65% y se situó en 471.443 millones de euros, gracias a que muchas entidades comenzaron a remunerar este tipo de ahorro con ofertas sustanciosas, en muchos casos por encima del precio oficial del dinero.