Garzón cita a Alierta y Villalonga como testigos por el caso de las 'stock options' de Telefónica
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, ha citado a declarar como testigos a varios miembros y ex componentes del Consejo de Administración de Telefónica en relación con la investigación sobre las "stock options" diseñadas por el equipo del ex presidente de la operadora Juan Villalonga. Tanto este último, como seis miembros de su consejo, están acusados de presunta estafa por la aprobación de varios planes de opciones sobre acciones para 100 directivos y la emisión de obligaciones convertibles ¢con exclusión de derecho preferente de suscripción de los socios¢, según el auto de la Audiencia.
El próximo 12 de marzo, tendrán que comparecer ante el magistrado, en calidad de testigos, Villalonga, José María Concejo e Isidro Fainé, actual vicepresidente de la operadora. Mientras que un día después, declararán el actual presidente de Telefónica, César Alierta, los ex miembros de Telefónica Francisco Gómez Roldán, Gaspar Ariño, Javier Echenique, Martín Velasco y Carles Vilarrubó; y los actuales consejeros Miguel Horta e Costa, Maximino Carpio y Antonio Masanell. También está citado al actual presidente de Telefónica Móviles, Antonio Viana.
Asimismo, el día 14 de marzo están citados el actual presidente de Repsol YPF y antiguo consejero de la operadora, Alfonso Cortina, Pedro Ballvé, Ignacio Larracoechea, José Maldonado y Luis Martín de Bustamante. Sólo Maldonado mantiene su cargo de consejero de Telefónica.
Además, Garzón ha solicitado a la entidad financiera Bankers Trust Company que remita "toda la información que obre en su poder sobre la realización y ejecución de la emisión de obligaciones convertibles en acciones de Telefónica, acordada por el consejo de administración de la compañía el 25 de junio de 1997, así como en relación con la emisión de obligaciones canjeables realizada por Telefónica Europe BV consecuencia de la anterior".
Beneficio ficticio
Las comparecencias están relacionadas con la presunta manipulación de la cuenta de resultados de 1998, según los afectados y demandantes, para los que Villalonga y sus consejeros maquillaron las pérdidas, al incluir más de 400.000 millones de pesetas de ingresos extraordinarios en las cuentas de resultados y no en reservas, tal y como establece la normativa mercantil.
Esta maniobra supuestamente permitió a Villalonga y a su equipo"crear un beneficio ficticio que permitiera mantener la alta cotización de las acciones", según la denuncia de los querellantes. Así, se elevaría el valor de las 'stock options' de las que se beneficiaron los directivos de Telefónica y el entonces presidente de la compañía, quién se embolsó 2.000 millones de pesetas, según alegaron los querellantes.