Dirigir personas, asignatura pendiente
A los ejecutivos les sobra formación técnica hoy en día, según los expertos. Pero hace falta adquirir habilidades para liderar equipos de profesionales
Bien preparados técnicamente, pero con una asignatura pendiente, la de manejar habilidades para dirigir a equipos profesionales. 'Es lo más difícil, por otra parte', apunta el director general adjunto del Instituto de Empresa, José Mario Álvarez Novales. 'Puedes tener muchos conocimientos y estar muy bien formado en alguna especialidad, o se r un gran un experto en finanzas, pero un directivo tiene que saber manejar emociones. Ahí está la clave del éxito del ejecutivo', señala Álvarez Novales.
Los directivos españoles, en general, están satisfechos con la formación que han recibido, según un estudio basado en una encuesta realizada a más de un millar de directivos españoles, publicado por Ediciones Deusto bajo el título de Dirigir en el siglo XXI. Los ejecutivos destacan, sin embargo, que hay lagunas, ya que echan en falta algunas áreas temáticas durante su formación. Los idiomas son los que se llevan la palma, sobre todo entre directivos que tienen entre 46 y 50 años de edad. Luego se sitúan los estudios en el extranjero y la formación en organización empresarial (esta última para ejecutivos menores de 35 años). Muy pocos dedican parte de su formación al área humanista y a la técnica especializada. Los directivos encuestados que en ese momento estaban realizando algún tipo de formación estaban ampliando sus conocimientos en tecnologías de la información, finanzas, recursos humanos y dirección general.
En España, según el estudio, prefieren la formación continuada. Sólo un 3% de los directivos asegura no tener interés por completar su formación. De hecho, una gran parte manifiesta sus deseos de completar su formación en varias áreas, como tecnologías de la información (45%), dirección general (30%) y ciencias humanas (23%); les siguen las áreas de finanzas, recursos humanos, ciencias sociales y marketing. Pero esta pretensión de mantener una formación continuada queda frustrado por la falta de tiempo. El 74% de los encuestados manifiesta no disponer de tiempo suficiente para seguir instruyéndose. A esto hay que añadir otro factor que no favorece esa formación continuada, como es su coste, y el hecho de que la formación que se ofrece no está adecuada a las necesidades de los directivos (así opina el 23%).
'Puedes tener muchos conocimientos y estar muy bien formado, pero un ejecutivo tiene que saber manejar emociones', dice Álvarez Novales
Los cursos de posgrado son valorados en los puestos de ingeniero comercial, director de marketing y financiero
En cuanto a la frecuencia, el 32% de los entrevistados prefiere la formación semanal y el 25% se inclina por una trimestral. Sólo el 6% quiere una frecuencia diaria. El estudio muestra que la lectura de libros y de revistas son los instrumentos más utilizados por los directivos encuestados, siguiéndoles de cerca la participación en conferencias y seminarios. La realización de cursos ocupa el tercer lugar como elemento de formación. La lectura de prensa es otro de los instrumentos empleados, pero con menor frecuencia. El informe resalta que, de todos los encuestados, tan sólo un 5% practica la formación virtual.
Más de la mitad de los directivos entrevistados estima que la formación que están recibiendo en las universidades los futuros ejecutivos es satisfactoria y un 20% manifiesta que el nivel es bajo. Cuando fueron preguntados sobre las áreas temáticas que se consideran de mayor importancia en la gestión directiva y que, por lo tanto, deberían tener un especial trato, los idiomas son los que aparecen en primer lugar, el 56% de los ejecutivos los consideran 'totalmente importantes'. Después aparecen el conocimiento de nuevas tecnologías (48%) y la capacidad de comunicación. Por lo demás, el 84% de los directivos españoles se encuentra satisfecho con su carrera profesional. Y respecto a cómo se ha gestionado, un 37% ha respondido que ha sido capaz de administrarla, otro 26% respondió que su carrera profesional ha evolucionado conforme a las necesidades de las empresas en las que ha trabajado, el 18% dice ser consciente de haber dirigido plenamente su carrera profesional en todo momento y el 15% contestó que en determinadas circunstancia la ha gestionado. pasa a la página siguiente
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Los avances tecnológicos han provocado grandes cambios en todas las áreas de conocimiento y los profesionales, sobre todo los directivos, han de recurrir a la formación continua para estar al día y mantener así su atractivo dentro de la empresa, según los expertos. Atrás quedaron los tiempos en que sólo los médicos debían seguir estudiando de entre todos los licenciados universitarios.
Como muestra, un ejemplo, las ofertas de empleo ya reflejan el creciente aprecio que de la formación de posgrado hacen las empresas. El último Informe Infoempleo, elaborado por Círculo de Progreso, asegura que más de un 4,5% de las ofertas de trabajo cualificado valoran explícitamente estos programas, mientras que hace tan sólo dos años este porcentaje apenas llegaba al 2%. Pese a que en el último año su demanda ha crecido para los puestos ofertados en todas las categorías profesionales y en todos los niveles de experiencia requeridos, son demandados, fundamentalmente, para el desempeño de aquellos que implican más experiencia laboral. Sin ir más lejos, el 10,53% de las ofertas que valoran este tipo de formación están vinculadas a cargos directivos, mientras que este porcentaje desciende hasta el 1,32% en la categoría de empleados.
En este sentido, los datos de Círculo de Progreso demuestran que es entre los candidatos a un puesto de trabajo que tienen entre cuatro y cinco años de experiencia laboral a los que se pide más formación de posgrado. 'Es lógico porque este complemento de formación pesa cada día más a la hora de ascender de categoría profesional. Sobre todo en los másteres en administración y dirección de empresas, los popularmente llamados MBA, se insiste en el desarrollo de habilidades directivas que antes sólo era posible adquirir mediante una larga experiencia de trabajo. A ello hay que añadir la completa actualización de conocimientos que suponen estos cursos de posgrado', sostiene María Benjumea, directora general de Círculo de Progreso.
Ahora bien, el atractivo del máster en dirección de empresas entre los empresarios ha decaído en el último año. El director de estudios de Círculo de Progreso, Salvador Aragón, atribuye este descenso a que 'las empresas prefieren una formación más específica en periodos recesivos'. Si nos detenemos en cuáles son los puestos en que son más apreciados este tipo de estudios, éstos son los de ingeniero comercial, director de marketing y director financiero. Para su ejercicio, la mayoría de las compañías prefiere un máster antes que un posgrado en cualquier otra materia. En consonancia con estos puestos están las áreas funcionales de la empresa que más interés demuestran por este tipo de formación. Marketing, recursos humanos y dirección general aglutinan, cada una de ellas, más del 10% de las ofertas que tienen en cuenta los programas de posgrado.
Las finanzas, motivo de preocupación
Además de habilidades para dirigir equipos a los ejecutivos españoles, les preocupa adquirir conocimientos financieros. Lo explica la directora de admisiones del máster en administración y dirección de empresas del Esade, Nuria Guilera. 'Hay dos vertientes, los directivos que piden formación más humana para dirigir equipos, pero también están los que piden formación financiera, en estrategias de empresa', apunta Guilera.Una de las ventajas de los cursos de posgrado, según Guilera, es que acortan el tiempo para adquirir la experiencia y habilidades necesarias para estar al frente de un equipo. 'Lo que podrían conseguir en 10 años lo puedes tener en menos con un máster'.
Carlo Galluci : 'Tienen que liderar personas'
El director de admisiones del programa para ejecutivos de Esade, Carlos Galluci, opina que dependiendo de la edad del directivo las necesidades formativas son distintas. Los jóvenes, de entre 25 y 30 años, lo que desean, en su opinión, es formarse en temas que le permitan el desarrollo profesional. Los que ya llegan o pasan de los 40 años pretenden poner al día sus conocimientos. 'Buscan relacionarse con otras personas de su mismo nivel. Su desarrollo personal es importante', añade.Pero lo que sí persiguen, en ambos casos, es conseguir habilidades que les permitan dirigir equipos de profesionales. 'Todos tienen en general asignaturas pendientes y les ayudamos a que tengan intuición para solucionar problemas, a saber liderar equipos de personas', señala Galluci. En definitiva, el papel de un directivo, además de elaborar estrategias y desarrollar proyectos empresariales, no es otro que el de dirigir personas. 'Y para ello tienen que estar tan preparados como para elaborar una estrategia de empresa'.
Ignacio Llorente : 'Hay que saber dirigir equipos'
En opinión del director de programas del IESE, Ignacio Llorente, los programas formativos para directivos cubren lagunas en los ejecutivos que no han desempeñado un cargo nunca. 'Los directivos que no tienen experiencia necesitan ganar en seguridad, y sobre todo tener una idea de cómo debe ser la estructura en general de la compañía'. Es necesario que conozcan todas las variables. Además, según Llorente, hay otro componente motivo de preocupación para el directivo, aprender a dirigir equipos. 'Para esto se requiere talante y reflexión'. Lo que buscan con los cursos de posgrado y los másteres, en definitiva, no es tanto adquirir conocimientos técnicos como mejorar un esquema de referencias en la toma de decisiones y ponerlo en práctica. 'Se trata de un proceso acelerado para adquirir experiencia directiva. Quieren entrenarse y aprovechar los conocimientos adquiridos con la formación de posgrado para tener bagaje y experiencia', añade.
José Mario Álvarez Novales: 'Si no te formas te quedas anticuado'
En opinión de José Mario Álvarez Novales, director general adjunto del Instituto de Empresa, hace años el botones de un banco podía llegar a hacer carrera dentro del mismo. Hoy día parece que no es posible. 'Se prefiere hacer cantera de gente universitario y luego formarla a la medida para que ocupen puestos de responsabilidad', señala Álvarez Novales, quien destaca que la formación continua es necesaria para poder hacer carrera profesional. Por ejemplo, los ingenieros de telecomunicaciones anteriormente no estudiaban un máster o programa especializado, 'pero llega un momento en que se dan cuenta de que necesitan una formación adicional'. Hay otro sector, como es de los licenciados en Medicina, en el que en un momento determinado se dan cuenta de que para dirigir personas necesitan adquirir conocimientos. En estos momentos, quien 'no se forma se queda anticuado', agrega este experto, para quien dirigir no es otra cosa que gestionar personas. Y por ello se demandan habilidades y estrategias que tienen más que ver con la gestión de las personas.