El Gobierno rechaza la reforma agraria aprobada hoy por la CE, que reduce las ayudas hasta el 19%
La Comisión Europea aprobó hoy la nueva normativa que actualiza la Política Agraria Común (PAC) y que supone, principalmente, una reducción sustancial de las ayudas y desligar las aportaciones económicas a la producción para pasar a un modelo de ayudas que tiene como referencia la explotación agrícola y/o ganadera y sus condiciones globales.
Así lo anunció hoy el comisario europeo de Agricultura y Pesca, el austriaco Franz Fischler, quien explicó que se reducirán las ayudas directas para los agricultores que recibieran actualmente más de 5.000 euros anuales y, muy especialmente, para quienes reciben más de 50.000.
La reducción prevista en las ayudas directas se iniciará en 2006 y culminará en 2012. Será progresiva sobre los niveles de recepción de ayuda y supondrá un recorte, para los mayores perceptores de ayudas, de hasta el 19% sobre los apoyos económicos actuales.
Ofensiva diplomática
El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, ha anunciado esta mañana en Sevilla que el Gobierno va a poner en marcha una "ofensiva diplomática" para entrar en contacto con los países que pudieran compartir los puntos de vista de España para tratar de configurar una Política Agrícola Común (PAC) "más equilibrada y adaptada" a la realidad de la agricultura española.
Además, distintas organizaciones agrarias y cooperativas han expresado su más absoluto rechazo a la medida. Así, el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Fernando Moraleda, rechazó la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) aprobada hoy por la Comisión Europea y aseguró que "perjudica al campo español". En declaraciones a Servimedia, Moraleda afirmó que la reforma aprobada "es incluso peor" que la planteada en junio pasado por el comisario europeo de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, ya que "reduce el presupuesto destinado al mundo rural desde el 20% al 6% actual".
Por otro lado, Francia e Irlanda han anunciado su intención de bloquear la propuesta de la Comisión Europea para la negociación agrícola ante la Organización Mundial de Comercio (OMC). Estos dos países no están de acuerdo con dicha propuesta y quieren que sea debatida por los Quince antes de su aprobación.