Alemania duda de que pueda alcanzar el equilibrio presupuestario en 2006
Alemania no sólo podría incumplir este año con los objetivos de déficit público impuestos por Bruselas, sino que, además, duda de que pueda alcanzar un equilibrio presupuestario en 2006, tal y como se comprometió el Gobierno. Joerg Müller, portavoz del Ministerio de Finanzas, reconoció ayer que para lograr el objetivo de déficit cero en 2006 sería necesario que la economía alemana creciera más de un 2% tanto este año como el próximo, algo que cada vez parece más difícil de lograr. 'La consecución de los objetivos de déficit a medio plazo podría darse casi por descartada', afirmó Müller.
Asimismo, el Ministerio de Finanzas dejó abierta la posibilidad de que el déficit público alemán logre situarse este año bajo la barrera del 3% del PIB, tope fijado por el Pacto de Estabilidad, aunque hasta el momento se había mostrado seguro de conseguirlo. Tampoco se descarta ya un nuevo aumento de la deuda pública para este año, posibilidad que había adelantado la prensa alemana.
Según los cálculos de los expertos, cada bajada de un punto en los pronósticos iniciales de crecimiento económico supone un aumento de medio punto en el déficit respecto a las previsiones iniciales. El ministro alemán de Economía, Wolgang Clement, insinuó la semana pasada que los objetivos de crecimiento económico del Gobierno serían revisados a la baja en el informe que se publicará el próximo 29 de enero. Hasta el momento, el Gobierno alemán ha contado con un aumento del PIB del 1,5% este año que permitiría reducir el déficit público hasta el 2,75%, pero todos los expertos consideran estos planes excesivamente optimistas. Los principales institutos económicos de Alemania cuentan con un crecimiento para 2003 de entre el 0,6% y el 1,1% y creen que el Ejecutivo tendrá que reducir sus pronósticos en al menos un punto porcentual, con el consecuente impacto en el déficit.
Ante esta situación, la oposición conservadora ha demandado la elaboración de un nuevo presupuesto. Dietrich Austermann, experto en asuntos presupuestarios de la Unión Cristianodemócrata (CDU), pidió ayer la revisión de las cuentas públicas para incluir en ellas la caída de la recaudación fiscal provocada por la debilidad económica, el aumento de los gastos en subsidios de desempleo y los efectos de las subidas salariales acordadas en el pacto por el convenio colectivo del sector público.
Por su parte, el ministro francés del Presupuesto, Alain Lambert, afirmó ayer que espera que el ejercicio de 2002 se cierre con un déficit de 46.800 millones de euros, en línea con la revisión presupuestaria del pasado otoño, lo que supondría un 2,8% del PIB.
A pesar de los 58.600 millones del saldo de déficit a finales de noviembre, Lambert se mostró confiado en que 'deberíamos estar en línea, según las últimas informaciones de que dispongo', con las cifras presentadas en el presupuesto modificado. El ministro admitió que hay todavía un elemento que puede pesar sobre el resultado final, que es el volumen de ingresos del impuesto sobre sociedades de diciembre.