Fiat cierra su peor año en Italia con una caída de ventas del 18%
Dominadora absoluta del mercado italiano durante más de un siglo, Fiat sufre ahora en su país. El fabricante de automóviles vendió un 18% menos en Italia en 2002. Su cuota de mercado descendió al 27,8%, la más baja en la historia de la compañía turinesa, tras dejarse más de seis puntos desde el 34,1% de 2001.
Fiat Auto, que en los ochenta controlaba el 60% del mercado italiano, cierra con estas cifras un año negro, en el que sus pérdidas se calculan en torno a 1.200 millones de euros y se suspendieron 8.100 empleos en cinco fábricas italianas. Su futuro se decide estos días entre la familia Agnelli, los bancos acreedores, el Gobierno y el financiero Roberto Colaninno, que aspira a liderar el reflotamiento.
El descenso de las ventas de Fiat -incluidas sus marcas Alfa Romeo y Lancia- triplica la reducción del mercado italiano, que fue de un 5,9% el pasado año, hasta 2,4 millones de coches. En un extraordinario mes de diciembre las ventas subieron un 51% debido a las ayudas gubernamentales, pero en ese mes Fiat sólo avanzó un 27%.
El Gobierno de Berlusconi estableció incentivos al cambio de automóviles, pero estas medidas pensadas para Fiat beneficiaron más a sus competidores Peugeot Citroën, Ford y Renault, que han seguido arañando cuota de mercado al fabricante nacional. Los malos resultados de Fiat se deben a una demanda inferior a la esperada para sus modelos, en particular el Stilo. En la compañía se explica además que se están abandonando canales de venta 'insanos', como las entregas a alquiladoras, para recuperar rentabilidad aunque se reduzca volumen.
La caída de las ventas de coches en Italia está en línea con los principales mercados europeos. En España las matriculaciones bajaron el pasado año un 6,6%; en Francia, un 4,9; en Bélgica, un 4,5, y en Holanda, un 3,7. Sin embargo, en el Reino Unido las ventas crecieron un 4,3% hasta una cifra récord de 2,56 millones.
Se calcula que la demanda mundial de coches ha caído un 0,6% el pasado año. Algunos fabricantes, sin embargo, han escapado a la atonía de los mercados occidentales. PSA Peugeot Citroën informó que vendió 3,27 millones de coches en 2002, un 4,3% más, gracias a la expansión en Europa oriental y China.
Las ventas de Volkswagen cayeron un 1,9% hasta 4,9 millones de automóviles, informó el consorcio alemán. BMW creció un 17%, gracias al éxito de su marca Mini, y superó por primera vez el millón de vehículos vendidos en el mundo. Por su parte, Mercedes Benz -que incluye Smart y Maybach- cerró el año pasado igual que 2001, con 1,23 millones de coches.