Mango se retira de Argentina cuatro años después de su llegada
La cadena de tiendas de ropa española Mango se retirará en marzo próximo de Argentina por falta de rentabilidad de sus locales en ese país, donde se instaló en diciembre de 1998.
"La operación local nunca llegó a ser rentable y con la devaluación del peso [que supera el 70% respecto del dólar desde enero de 2002], el negocio no cierra", señaló Isaac Andik, socio fundador de la empresa, en declaraciones recogidas hoy por el diario económico bonaerense El Cronista. El periódico ha informado que Andik viajó a Buenos Aires para explicar personalmente a los 65 empleados de la filial de Mango las razones de la decisión de la empresa.
"No se justifica producir en Buenos Aires para cuatro puntos de venta ni tampoco hay margen para mantener los precios en dólares", apuntó Andik.
Tres tiendas liquidan
En los próximos diez días, Mango cerrará los tres locales que tiene en otros tantos grandes centros comerciales de Buenos Aires y sus alrededores. La mercancía de los locales cerrados se venderá a precio de liquidación en la tienda que la empresa posee en la calle Florida, principal paseo comercial del centro de Buenos Aires, que será el último en cerrarse, en marzo próximo.
Mango esperará que mejoren los precios de los inmuebles para vender ese local, el primero que abrió al instalarse en Argentina con una inversión inicial de 7 millones. El año pasado, cuando se agudizó la crisis económica argentina, la empresa española había iniciado un plan de ajuste con el cierre de dos puntos de venta. Las ventas de Mango en Argentina cayeron el año pasado el 35% respecto de 2001, según fuentes del sector textil y de vestimenta citados.
2002, año aciago en el panorama laboral argentino
El año pasado 492.000 personas perdieron su puesto de trabajo en Argentina, seis veces más que en 2001, según un informe de una consultora privada publicado hoy por el diario Clarín. El estudio de Tendencias Económicas confirma que la leve recuperación que despunta en la economía argentina tras cuatro años de recesión se ha empezado a sentir en materia laboral. El número de despidos registró tres descensos mensuales consecutivos en el último trimestre del año pasado. Con 2.300 despedidos, diciembre fue el mes con el menor número de despidos por decisión de la empresa para la que trabajaban.