La prioridad de Brasil será el control del gasto público
Las prioridades económicas del nuevo Gobierno brasileño serán el control del gasto público y la inflación. 'Nuestra principal meta es el ajuste definitivo de las cuentas públicas para que podamos garantizar la capacidad del Gobierno para cumplir sus compromisos', señaló el nuevo ministro de Hacienda, Antonio Palocci, en la ceremonia en la que juró el cargo.
En su discurso de asunción del cargo, el nuevo ministro descartó sorpresas en la política económica y resaltó el compromiso del presidente de Gobierno, Luiz Inácio Lula da Silva, con la responsabilidad fiscal, el control de la inflación y el tipo de cambio flotante. Palocci aseguró que el Ejecutivo de Lula 'luchará por alcanzar el superávit que sea necesario para garantizar el cumplimiento de la deuda pública' y de 'todos' los compromisos del país.
El acuerdo firmado en agosto con el Fondo Monetario Internacional (FMI) fija en el 3,75% la meta de superávit primario para 2003. La Administración espera recibir este año 24.000 millones del FMI. Palocci se mostró confiado en lograr el objetivo de superávit y no descartó elevar la meta.
Respecto al compromiso con la inflación y pese a lo dicho en campaña, Palocci aseguró que mantendrá los altos tipos de interés del 25% para controlar los precios.