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Planes

FCC y Agbar ejecutarán el mayor proyecto de aguas privado de España

El consejo de administración de la sociedad pública Riegos Sistema Segarra-Garrigues (Regsega), formada por el Estado, la Generalitat de Cataluña y la comunidad de regantes local, adjudicó ayer por 1.102,6 millones la red de riego del canal del mismo nombre. Es la obra privada más importante del sector planteada en España y con ella suministrará agua a 70 municipios de seis comarcas de Lleida (Noguera, Segrià, Pla d'Urgell, Urgell, Segarra y Garrigues). La ejecución del proyecto permitirá transformar en tierras de regadío un total de 70.150 hectáreas.

A partir de ahora, el grupo de 11 empresas ganador del concurso tiene un plazo de nueve años para construir el sistema de riego del canal. Las obras se iniciarán en mayo próximo y terminarán en 2011. Sigue pendiente la ejecución del canal principal, que parte del embalse de Rialb y que seguramente se licitará en el primer semestre del año próximo. De ese cauce troncal, de 86 kilómetros de longitud y que será construido por el Estado, sólo se ha iniciado la primera fase. Su presupuesto global es de 462 millones de euros.

Trámites completados

El consejero de Agricultura de la Administración catalana, Josep Grau, destacó en la rueda de prensa de presentación del proyecto que la concentración parcelaria de los 39 municipios afectados (la mayor realizada hasta la fecha en Cataluña) ya se ha ejecutado, por lo que las obras de construcción de la red de canalizaciones (3.500 kilómetros de tubos, 43 embalses de regulación y 17 estaciones de bombeo) podrá empezar en mayo, 'cuando el Gobierno central publique la declaración de impacto ambiental correspondiente' y se superen todos los trámites pendientes.

El consorcio ganador ha sido el formado por FCC Construcción, Acsa Agbar, Copisa, Copcisa, Constructora Calaf, M&J Gruas, Benito Arnó, Aqualia Gestión Integral del Agua (FCC), Romero Polo, Aridos Romà y Sorea.

Estas 11 compañías se han adjudicado la construcción del sistema de regadío en pugna con otro grupo de empresas encabezado por Dragados y Sacyr. Estos dos grupos constructores formaron consorcio, a su vez, con la Compañía General de Aguas de Cataluña, Comsa, Corsam-Corviam, Técnica y Proyectos (Typsa) y Emte. Josep Grau, quien no quiso valorar la adjudicación, remarcó que Regsega desestimó un total de 10 ofertas del grupo ganador y las seis presentadas por Dragados.

El sistema de financiación de este enorme proyecto de infraestructuras es mixto. El concesionario adelanta el dinero para ejecutar la obra, que se recuperará con aportaciones del ente concedente y de los regantes.

Coste del agua

Precisamente, las aportaciones de los regantes para pagar su parte de la obra se podrán articular a través de varias fórmulas financieras. Si el pago se hace al contado, el coste oscilará entre 3.150 euros por hectárea y 1.575 euros, dependiendo del tipo de zona de regadío.

La modalidad financiada a 30 años estipula que el usuario deberá pagar cuotas anuales de entre 166 euros por hectárea y 332 euros. Además, se estudiarán otros tipos de financiación, con préstamos con un plazo de devolución de entre 5 y 15 años.

Por otra parte, el precio final del metro cúbico para los regantes podrá alcanzar los 0,059 euros. Los recursos hídricos necesarios se han estimado para el funcionamiento del sistema son de 342 hectómetros cúbicos al año. La ejecución de las nuevas zonas de regadío implican también la construcción de más de 1.500 kilómetros de caminos, que incrementarán la comunicación interna de las comarcas.

Además, el canal Segarra-Garrigues permitirá, según el Gobierno catalán, diversificar la riqueza agrícola, con la introducción el cultivo del olivo, el almendro, el girasol, la cebada, el maíz y los viñedos.

El titular del Departamento de Agricultura catalán se refirió, especialmente, a las medidas ambientales que incluye el concurso.

En este sentido, el estudio de impacto ambiental que realizó en su momento el Ejecutivo catalán ha quedado reflejado en la oferta ganadora, que excluye 5.800 hectáreas de regadío, que tendrán uso exclusivo para crear un parque para aves esteparias.

La constructora aporta 100 millones a su filial Aqualia

Aqualia es la nueva cabecera del grupo FCC para el negocio de la gestión del agua, que no ha podido comenzar con mejor pie su año de andadura. La concesión del canal de riego Segarra-Garrigues es el mayor proyecto que ha ganado hasta ahora y encaja en los planes de crecimiento diseñado por el grupo en este campo. No en vano, la concesión, que ahora se le ha adjudicado junto a Aguas de Barcelona y otros nueve socios, implica la transformación en regadío de 108.000 hectáreas (70.150 netas) en las comarcas ilerdenses de Noguera, Segarra, Urgell, Pla d'Urgell, Garrigues y Segrià y su explotación durante 30 años. Precisamente, hace pocas semanas la matriz aportó 100 millones de euros a Aqualia para financiar esa estrategia de desarrollo. El capital social de esta filial, que ya está desembolsado, ha pasado de 45 millones a 145 millones de euros. Aqualia gestiona el agua en más de 500 municipios de toda la geografía española, ofreciendo un servicio a una población superior a los seis millones de habitantes en agua potable y a 9,5 millones de habitantes en depuración de aguas residuales. Entre las últimas adjudicaciones de Aqualia destacan el contrato de abastecimiento de agua en Lliria (Valencia) por un periodo de 25 años, la concesión del servicio municipal de agua de æpermil;cija (Sevilla) a través de una empresa mixta, la gestión integral del agua de Badajoz por 25 años o la gestión del servicio público de abastecimiento de Alcoy (Alicante) por un plazo de 20 años, así como la explotación, mantenimiento y conservación de la depuradora de aguas residuales de esta ciudad. En el exterior, FCC está presente en Portugal. Al otro lado del Atlántico, en concreto en Latinoamérica, la compañía opera en Colombia, Venezuela, Argentina, Brasil y México bajo la firma Proactiva, creada junto a su socio Vivendi Environnement.

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