Las compañías subirán el seguro de coches por encima del IPC real
El precio de los seguros de coches seguirá subiendo el próximo año y lo hará por encima del IPC real (ahora está en el 3,9% en tasa interanual), según las estimaciones de varias aseguradoras consultadas. Además, habrá un cambio en los contratos que se firmen a partir de abril, ya no tendrán cobertura ilimitada como hasta ahora y el tope será 50 millones de euros.
El cliente sufrirá una nueva subida de precios en el seguro de su coche el próximo año, como viene ocurriendo en los últimos ejercicios. Según diversas aseguradoras consultadas en el ramo, el aumento estimado estará por encima del IPC real (en noviembre la tasa interanual está en el 3,9%).
Las entidades rechazan que llegue al 20% de incremento que tuvo en el año 2000, la subida más brusca de los últimos años. Pero puede estar en línea con la del año pasado, que se situó en el 9,3% (el triple que el IPC).
Aunque en 2001 las aseguradoras de automóviles lograron salir de números rojos tras varios años sin lograr cubrir los gastos con los ingresos de las primas, las tasas de siniestralidad a las que tienen que hacer frente 'aún son muy elevadas', dicen las entidades. Y ésta es la razón esencial por la que justifican el aumento de tarifas.
El sector pasa ahora por un momento de transición porque las entidades aspiran a mantener sus buenas cifras. La clave es cuadrar los ingresos de las pólizas con los gastos. Y por eso ahora la mayoría de compañías están siendo mucho más rigurosas a la hora de aceptar y aplicar tarifas a sus asegurados.
Además de la subida de precios, el próximo año habrá otra modificación para los contratos que los asegurados firmen a partir del próximo mes de abril. Las compañías de reaseguro (que respaldan parte de las pólizas de las aseguradoras) ya comunicaron hace casi dos meses a las compañías del ramo de autos que iban a dejar de dar cobertura ilimitada a las pólizas a partir del próximo año.
Problema jurídico
Tras varias reuniones en las que ha intervenido la patronal del seguro Unespa, las aseguradoras han logrado un principio de acuerdo por el que esta decisión se aplaza hasta el 1 de abril para los nuevos contratos, explican fuentes implicadas en la negociación. Así, los nuevos contratos que se hagan desde el próximo 1 de abril tendrán un tope de indemnización de 50 millones.
'Nunca ha habido en España un accidente de coche que haya superado los 50 millones de euros', señalan en distintas aseguradoras. Es la explicación para mostrar que el fin de la garantía sin límite apenas varía en la práctica las prestaciones de las pólizas a los asegurados.
Aunque supone una teórica rebaja de la cobertura, no se traducirá en una reducción en el precio de la póliza porque 'la parte de la tarifa que correspondería al reaseguro es mínima, entre el 1% y el 2% incluso', justifica un directivo de una de las principales aseguradoras de automóviles.
El cambio en los contratos no supondrá grandes dificultades para las nuevas pólizas. Pero sí plantea un problema jurídico para los actuales clientes con póliza ya contratada porque la aseguradora no puede cambiar unilateralmente las condiciones sin el visto bueno del cliente.
El principio de acuerdo con las reaseguradoras, tras dos meses de negociación, da de plazo un año, hasta 2004, para buscar una salida al obstáculo legal. Las aseguradoras han solicitado ayuda a la Dirección General de Seguros (DGS). Reclaman una solución legislativa. El sector quiere conseguir un cambio en la normativa para que sea legal cambiar la cobertura al tope de 50 millones para todos los contratos. Esta modificación podría materializarse en un reglamento o en una disposición en las nuevas normas que tiene en estudio la DGS.
Las aseguradoras reconocen que no ayuda el reciente relevo en la dirección general (José Carlos García de Quevedo ha sido nombrado director en sustitución de Pilar González de Frutos). 'Las cosas por el momento no han avanzado y probablemente habrá que retomar la cuestión desde el principio', explican fuentes de las aseguradoras implicadas en el problema.
Consecuencias del 11-S
Entre las reaseguradoras con las que suelen trabajar las compañías de autos figuran Munich Re (filial del líder mundial del reaseguro), Swiss Re, Nacional de Reaseguros y Nacional Suiza.
El sector en general pasa por momentos complicados tras los atentados del 11-S, que les obligaron a replantearse las coberturas. Las reaseguradoras suelen cubrir la parte más cara de los siniestros y los atentados terroristas pusieron de manifiesto que el coste puede alcanzar cuantías antes insospechadas. La consecuencia es que han puesto límites (las primeras afectadas fueron las aerolíneas) y han acelerado la aplicación de subidas en las tarifas que ya se empezó a notar en 2001.