'La semana que viene se podrán intercambiar mensajes multimedia'
Los nuevos móviles multimedia empiezan a copar los anuncios navideños. Pero hay varios problemas, como la interoperabilidad, que pueden empañar las ventas del nuevo terminal. Luis Ezcurra explica cómo se solucionarán éste y otros inconvenientes
Telefónica Móviles las ha bautizado como las Navidades del móvil multimedia, aunque el propio Luis Ezcurra, director general de Desarrollo de Servicios de la compañía, asegura que la verdadera implantación de los nuevos terminales y los correspondientes servicios se producirá a lo largo de todo el año. 'El éxito o el fracaso de esta campaña de Navidad de Movistar no se medirá por el número de altas, sino en función del total de servicios que consuman nuestros clientes', afirma el ejecutivo, que llegó a Telefónica Móviles hace un año procedente de Motorola.
Ezcurra asegura que el principal problema al que se enfrentaban las operadoras, la interoperabilidad, está técnicamente solucionado. Aunque el ejecutivo de Telefónica no lo reconozca abiertamente, la barrera para llegar a un acuerdo entre las tres operadoras de telefonía móvil que operan en España ha sido y sigue siendo el aspecto comercial. 'No son capaces de facturar entre ellos', aseguran fuentes de un fabricante.
Aun así, Ezcurra confía plenamente en la nueva generación de terminales, y cree que los nuevos servicios (sobre todo la mensajería multimedia) serán un revulsivo para el sector, aunque las espectaculares cifras de altas de los últimos años no se volverán a producir.
Pregunta. Tanto Telefónica Móviles como sus competidoras basarán está campaña navideña en el móvil multimedia. ¿Qué expectativas tiene Móviles?
Respuesta. Desde un punto de vista de tráfico, será a lo largo del año que viene cuando se vaya desarrollando. Las Navidades son un buen momento para publicitar el móvil multimedia, para decir que está disponible y explicar para lo que sirve. No estamos obsesionados con que éstas sean las Navidades de la mensajería multimedia, porque el número de clientes todavía sigue siendo pequeño comparado con los 18 millones en total que tenemos. Sí es el momento de decirle al usuario: felicita como puedas, con un SMS, con mensajes multimedia, con llamadas de voz, etc.
P. Uno de los escollos más importantes a solucionar es la interoperabilidad. ¿Cuándo podrá el usuario mandar un mensaje multimedia a otro móvil de diferente operadora?
R. En España, cualquier cliente podrá mandar una foto desde su teléfono móvil a otro que no sea de su mismo operador a partir de la semana que viene.
P. ¿Se han solucionado todos los problemas técnicos?
R. Nos ha sorprendido favorablemente que la cantidad de esfuerzo técnico que ha habido que hacer para la interoperabilidad ha sido relativamente pequeña y bastante sencilla. El periodo de tiempo ha sido también relativamente corto y razonable, menos de seis meses. Costó mucho más interoperar los sistemas de mensajes cortos que lo que ha costado resolver esto, en tiempo y en esfuerzo tecnológico. Y es una tecnología infinitamente más sencilla.
Las tres operadoras sabemos de sobra, y lo teníamos claro desde el principio, que si queremos que esto salga bien, no sólo tenemos que interoperar, sino que se haga también con el resto de los operadores europeos. La gracia de la mensajería multimedia es que sacas una foto y la mandas al segundo. Y eres mucho más proclive a eso cuando estás viajando. Cuanto antes tengamos la interoperabilidad dentro y fuera de España, mucho mejor.
P. ¿Cuándo llegará eso?
R. Ya se están mandando fotos en pruebas desde otros países, pero no puedo decir una fecha exacta.
P. ¿Qué recursos va a destinar Telefónica a la campaña del móvil multimedia? Se estima que la inversión podría superar 30 millones de euros entre las tres operadoras.
R. No lo sé exactamente, pero nuestra contribución a esa cifra debe ser pequeña. Este es un año de fidelización de clientes, de transmitirle al usuario los servicios de que disponemos, no de captación. La inversión es mucho menos agresiva que otros años, porque se trata de explicarle sólo en qué consiste esto. Los 30 millones de los que hablas me parece una cifra muy alta, debe ser incluyendo también a los fabricantes.
P. ¿Con cuántos clientes consideraría Telefónica Móviles satisfactoria la campaña navideña?
R. Pensamos que vamos a terminar con 18.200.000 o algo así, unos 100.000 más que actualmente. Pero reitero que, en los últimos años, la Navidad ha sido un revulsivo para captar miles de clientes y este año no lo es. Las campañas pasadas son irrepetibles. Hasta el año pasado, el enfoque era: gástate el aguinaldo en comprarte un nuevo móvil y contratar el pack con Movistar. Y este año no es en absoluto el mensaje, sino: gástate el dinero en felicitar a alguien a través del móvil. Queremos recordarle a la gente que hay otras modalidades de uso del móvil y otras formas de felicitar la Navidad. El éxito o el fracaso de esta campaña de Navidad se medirá en función de lo que hayan consumido nuestros clientes del total de nuestros servicios.
P. ¿Volverán esas cuotas de crecimiento, como el año pasado, cuando Movistar consiguió un millón de altas netas?
R. Creo que no volverán esos crecimientos, estamos llegando a la línea casi plana. Pero el número de terminales que se venden sigue subiendo, la industria de los aparatos y de los servicios sigue creciendo.
P. La mayoría de las aplicaciones que se están desarrollando son juegos y mensajes multimedia, dirigidos a un público joven. El precio de estos servicios será fundamental para su acogida, ya que una de las razones del éxito de los SMS es su bajo coste. ¿Bajarán las tarifas?
R. Hemos hecho varias modalidades de tarifas pensando en los grandes usuarios de mensajes, especialmente los más jóvenes, que permite ahorros sensibles si se hace un consumo masivo. Desde el punto de vista de los precios habrá elasticidad. Con los nuevos servicios de juegos, que lanzamos en verano, nuestros clientes consumen unos cinco euros al mes. Pues ahora lanzamos una serie de juegos a 2,5 euros y el número de descargas crecen de forma impresionante. Si renovamos los juegos, crece más todavía. Lo que demuestra que el precio es importante, pero en muchos aspectos empieza a no serlo, en favor de lo atractivo que sean los servicios.
P. Al contrario que con otros aparatos, como el DVD, parece que está costando mucho convencer al usuario de que se pase al móvil multimedia. Una de las barreras es el precio de los aparatos, que sigue siendo muy alto.
R. En sólo un año se dará la vuelta a esta tendencia y habrá más teléfonos multimedia que convencionales. Seguro que antes del verano habrá teléfonos multimedia con cámara a 200 euros, y sin ésta, a menos de 150 euros. Pero no comparto la idea de que el usuario sea reacio al móvil multimedia. Parece que seguimos esperando que haya una especie de explosión, algo que no se dará más.
Sin embargo, es sumamente importante que más de seis millones de personas hayan entrado alguna vez en e-mocion, y que un millón y medio lo hagan de forma regular. De ADSL hay muchos menos usuarios que clientes nuevos de e-mocion. Lo que ocurre es que estamos esperando que una sola aplicación sea la estrella, y eso ya no se va a producir. Quizás la mensajería multimedia sea lo que más se le parezca. Cada vez más vamos a un modelo, lo que será la tercera generación, donde hay muchas cosas diferentes para muchos grupos diferentes. La misión del operador es disponer de unas bases tecnológicas fuertes para que se vaya desarrollando mercado en grupos reducidos de clientes.
P. ¿Sigue en pie la decisión de lanzar i-mode? En algunos países europeos, como Alemania, no está teniendo la acogida esperada...
R. Lo lanzaremos en primavera, aunque no podemos precisar la fecha exacta. La idea es reconvertir e-mocion, porque es un servicio muy reconocido, sobre todo entre los clientes más jóvenes. Vamos a partir de esa base y le vamos a incorporar una tecnología, un modelo de negocio que hemos adquirido de Docomo a través de una licencia. Permitirá que la gente que disponga de un terminal capacitado acceda a unos contenidos mucho más ricos, con más colorido y con una configuración diferente a la que hoy ofrecemos. Pero no nos vamos a complicar la vida en explicarlo técnicamente, hay que superar el lenguaje de las siglas.