Lula pide a Bush que EE UU mantenga abiertas las líneas de crédito a Brasil
De las declaraciones de Lula tras el que ha sido su primer encuentro con Bush se deduce que el grado de entendimiento entre los dos líderes fue alto. Ambos acordaron la celebración de una cumbre bilateral en enero, después de que Lula asuma el cargo el día 1. 'Bush no sólo fue cordial con mi delegación, sino que propuso una agenda común para los dos países. A partir de enero podemos hacer una reunión involucrando a los dos Gobiernos para discutir los problemas que nos interesan', dijo Lula.
El presidente electo aprovechó su viaje a EE UU para confirmar que Antonio Palocci, el responsable del equipo de transición, será el futuro ministro de Hacienda. 'Como sé que la economía está en terapia intensiva, nombré un médico como ministro de Hacienda y coordinador de la transición', dijo en la capital estadounidense.
El líder brasileño encaró la reunión con un propósito claro, garantizar la colaboración de la Administración Bush a la recuperación brasileña. 'Aunque tenemos problemas con el sistema financiero, EE UU podría contribuir a abrir las líneas de crédito a Brasil', dijo.
Por ahora, Lula parece haber recibido una tregua por parte de la comunidad financiera internacional. De hecho, la Reserva Federal de Nueva York ha organizado para hoy un encuentro entre Palocci y un amplio número de representantes de la banca estadounidense, a petición de éstos. EE UU es el primer inversor extranjero en Brasil.
'La prioridad es tratar el tema de las líneas de crédito para las empresas brasileñas y demostrar que la economía de Brasil tiene indicadores positivos', dijo Palocci el lunes, a su llegada a Washington. Ante la alta petición de entrevistas por parte de los banqueros, Palocci deberá volver a Nueva York antes de final de año.
No fue el único apoyo financiero que ayer recibió Brasil. La número dos del Fondo Monetario Internacional (FMI), Anne Krueger, representante del ala más dura del organismo, minimizó ayer el impacto de la inflación en Brasil y aseguró que la recuperación del real en las últimas semanas permitiría compensar las subidas de precios en la mayor economía suramericana.
'Bendición' del FMI
Sin embargo, el real ha vuelto a perder valor frente al dólar desde el pasado jueves y ayer cerró a 3,80 unidades por divisa estadounidense.
Aunque la inflación en Brasil alcanzó en noviembre el máximo en ocho años, Krueger confió en que ello no debe afectar al nuevo programa económico del país. 'Como el tipo de cambio ahora se está apreciando en términos nominales, algo de eso la inflación se podría revertir', dijo.
Es más, la funcionaria insistió en que según una regla basada en su propia experiencia, por cada alza del 10% en el valor del real habrá aproximadamente una reducción del ratio deuda/PIB del 5%.
El único pero relativo de esta tregua es el nombramiento de John Snow como secretario del Tesoro de Estados Unidos, al que los analistas brasileños cuestionan por su desconocimiento de la realidad del país. Lula, que hoy viaja a México y mañana a Ecuador, también transmitió a Bush su deseo de aplicar una política exterior 'más osada' para Brasil, que profundice sus relaciones no sólo con EE UU, sino con toda América del Sur.