Delphi vende su fábrica de La Rioja al grupo Collins Aikman
La fábrica riojana del productor de componentes para el automóvil Delphi tendrá nuevo dueño, también estadounidense. El grupo Collins & Aikman ha cerrado la compra del centro situado en Agoncillo, que tiene 560 empleados, por un monto que no ha sido precisado, según fuentes de Delphi.
La planta de Agoncillo se dedica a producir elementos de interior, como tableros, piezas de plástico y aislamientos acústicos, así como vidrios encapsulados y parachoques. Delphi consideró que esta actividad no formaba parte de su negocio central, por lo que ha atendido la oferta de Collins, ya presente en España a través de una fábrica en Vitoria que suministra componentes a Mercedes Benz.
Todo el personal fijo afectado se quedará en el centro riojano bajo la nueva propiedad, según un compromiso adquirido entre las partes. Las actividades se mantendrán, a excepción de la producción de puertas deslizantes eléctricas, que Delphi trasladará a Portugal.
Delphi no tiene previstas más desinversiones en España, dijo un portavoz. Actualmente el grupo, antigua filial de General Motors, tiene nueve fábricas: tres en la provincia de Cádiz, otras tres en Barcelona, dos en Zaragoza y la otra en Pamplona. En estos centros trabajan unas 5.300 personas. La empresa cerró el año pasado otro centro en âlvega (Soria).
Mientras Delphi produce todo tipo de piezas para automóviles, Collins & Aikman está especializada en piezas plásticas para interiores, alfombras, aislamientos sonoros, asientos y techos convertibles. Tiene 25.000 empleados en 15 países. Fundada en 1843, su sede central se encuentra en Troy -junto a Detroit (Michigan)-, donde también se encuentran Delphi y otras empresas del sector.
Delphi desveló ayer sus nuevas previsiones. El grupo prevé un beneficio neto de 512 millones de dólares antes de cargas por ajustes en 2002 y de 600 millones en 2003. Los ingresos crecerán el año que viene un 3%, hasta 28.000 millones, de los que un 39% se logrará fuera de GM.